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domingo,
15 de
julio de
2007 |
Chicles protectores de la salud bucal
Con el paso de los años se han realizado importantes estudios para analizar no sólo los efectos y beneficios de los chicles en la boca, sino también la posibilidad de incorporar, tópicamente, nuevos ingredientes y sumar beneficios que ayuden a evitar enfermedades bucales. Así es como diferentes universidades dedicadas a la investigación concluyeron que masticar un chicle sin azúcar y con Xilitol durante 20 minutos después de las comidas reduce la formación de placa generadora de caries, estimula la producción de saliva (elemento esencial de la salud bucal), favorece el barrido mecánico que se genera por la fricción de la goma con el diente al masticar y reduce los efectos negativos de la ingesta de azúcar.
La saliva, estimulada por la masticación, es un recurso biológico por medio del cual se mantiene la humedad de la boca, facilitando los procesos de digestión y locución, entre otros. Además alberga como habitantes naturales a más de 400 colonias de microorganismos, tanto animales como vegetales, que conviven en ella de forma permanente, formando un ecosistema.
La ingesta exagerada de azúcar provoca un desequilibrio en este ecosistema, que permite a los streptococcus mutans (una de las colonias animales que viven en el mismo) transformar al medio en ácido y desmineralizar el esmalte generando caries.
Cuando se consume un alimento o producto que contenga azúcar o sus derivados como ingrediente, el valor del pH de la boca desciende a 4 puntos, indicando un alto nivel de acidez. Si en su lugar se utiliza xilitol, el pH de la boca mantiene su nivel neutro.
Sustancia natural
El xilitol es un edulcorante natural que se extrae principalmente de la corteza del abedul y además de utilizarse para aplicaciones gastronómicas, es utilizado como ingrediente esencial en los chicles sin azúcar ya que su ingesta frecuente, a través de la masticación provoca una importante reducción de la placa bacteriana.
Este proceso se debe a que los streptococcus mutans se alimentan de esta sustancia que actúa inhibiendo el metabolismo de la bacteria, evitando la formación de ácidos (producto de su proceso digestivo) que desmineralizan el esmalte de los dientes. También disminuye la cantidad de bacterias porque impide su reproducción.
El flúor protege el esmalte dentario de la placa bacteriana y lo fortalece además de reemplazar las sales de calcio del esmalte natural por otras sustancias menos desmineralizables.
Su ingesta debe ser en forma frecuente y la combinación de xilitol y flúor resulta la simbiosis ideal ya que juntos potencian su efecto.
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