Escándalo por jubilaciones de privilegio a intendentes

Tiene media sanción en provincia de Buenos Aires, pero Solá dice que vetará el proyecto

La norma que permitiría a los intendentes de la provincia acceder a una jubilación de privilegio murió antes de nacer, ya que el gobernador Felipe Solá anunció que vetará el proyecto aprobado por Diputados si el Senado bonaerense lo convierte en ley. En tanto, el presidente Néstor Kirchner manifestó su “indignación” por la iniciativa de los legisladores provinciales, según comentó el ministro de Gobierno, Florencio Randazzo, tras haber dialogado telefónicamente con el jefe del Estado.

   “Es el colmo” y “una burla a la gente”, sostuvo Solá desde Washington, donde gestiona créditos ante organismos financieros internacionales, al declararse sorprendido por la sanción de la iniciativa en la Cámara baja; aseguró que “no tenía idea” de ese proyecto y confió en que la Cámara alta lo rechace, aunque advirtió que de no hacerlo “va al veto”.

   El gobernador ironizó que “los intendentes no vienen de Vietnam” y remarcó que “el proyecto es un desastre”, porque busca obtener privilegios “que el gobierno no concederá”. También el vicepresidente de la Nación, Daniel Scioli, el candidato de Kirchner para suceder a Solá, opinó que el proyecto de marras “va a contramano de las políticas de este gobierno”, y lo calificó de “ridículo”.

   La polémica norma beneficia a los 134 intendentes de la provincia con una jubilación de privilegio a la que podrán acceder tras cuatro años de gestión, a partir de los 50 años de edad. Además, establece que los futuros jubilados cobrarían 50 por ciento de lo percibido por un intendente en funciones. La media sanción fue votada el miércoles por los bloques del Frente para la Victoria y del PJ, en ausencia de los legisladores del ARI y del radicalismo.

   El ARI denunció que la norma fue aprobada luego de que se retiraran sus legisladores (y de otros bloques), antes de tratarse la ley de educación, ocasión aprovechada por las bancadas del FPV y el PJ para votarla. Agregaron que la iniciativa “fue moneda de cambio para obtener el quórum para la sanción de la ley de educación, por lo que ”la actitud de sorpresa expresada por Solá parece poco creíble”.

La iniciativa fue avalada por kirchneristas y bonaerenses.