Relato de niños que matan y mueren en La Tablada

A seis días del crimen de un chico de 13 años cayó su supuesto agresor, que tiene 16

Leo Graciarena / La Capital

“Es mentira que Milton formara parte de una banda en Tablada. Era un buen chico, trabajaba e iba a la escuela nocturna. Lo mataron para robarle la bicicleta”. Con la voz dominada por el dolor, los familiares de Milton Nahuel Godoy desean limpiar su nombre. El pibe tenía 13 años y el viernes pasado murió apuñalado en Centeno y Ayacucho cuando iba con otro chico, de 15, quien resultó herido. La policía ligó su crimen con la guerra de grupos que azota el barrio La Tablada. “No estaba en ninguna bandita”, dice su familia.

   Efectivos de Patrulla Urbana detuvieron ayer en Buenos Aires al 4800 a Pablo. El pibe, de 16 años, portaba una cuchilla de 25 centímetros de hoja y si bien fue llevado a la seccional 11ª sólo por portar el arma, allí admitió ser quien mató a Milton Godoy.

“El sueño de Milton era ser embarcado”, contaron Hugo Javier Chamorro, su papá de 30 años y Emilse Godoy, su mamá, de 29. “Lo que le pasó no era para él”, explicó Delia Labrador, la abuela de Milton, de 46 años.

   Cuentan que su mundo tenía tenía tres paradas: la casa de su papá, en el Fonavi; la de su mamá en Colón al 4300 o la de su abuela, que tiene una pollería en Ayacucho al 4000. Y para ir de un lugar a otro usaba su bicicleta playera color blanco. La misma que le arrebataron junto a su vida el viernes 18 de mayo. “Estaba en mi casa y a eso de las 7 de la tarde, le pedí que llevara una bolsa con ropa para sus hermanos a la casa de su mamá. Le dije: «Apurate que tenés que ir a la escuela”, rememoró su abuela. “Salió con su prima de 17 años en bici y no volvió más”, explicó Delia.

   Milton fue hasta la casa de su mamá, dejó una bolsa con ropa y regresó a lo de su abuela. Tenía que buscar sus carpetas para ir a la nocturna. “En Garibaldi, pasando Colon, se encontró con el Rengo (Francisco G., de 15 años) quien le dijo: «Llevame»”, recrearon los familiares del pibe muerto. “Cuando iban por Ayacucho, pasando Centeno (un lugar donde varios vecinos han denunciado públicamente que se vende droga), nos cuentan que un solo pibe los atacó. Al Rengo lo hirieron y salió corriendo para su casa. A Milton lo dejó solo y ahí recibió tres puñaladas: en el brazo izquierdo, el corazón y en la cara”, explicó Delia. El pibe rubiecito y de ojos celeste quedó en el piso. El agresor se llevó la bici y desapareció. Milton murió media hora después en el Heca, llevado por un patrullero.

   “Llegamos donde estaba Milton y la gente lo rodeaba sin hacer nada. Para los vecinos todo eso es un espectáculo y nadie quiere perderse un detalle”, dijo Delia. “Cuántos chicos de Tablada se salvarían si las autoridades atacaran el problema de la droga, esa porquería que los envenena”, dijo la mamá de Milton.