Receta italiana para el despegue pyme

Pymes, tecnología y valor agregado en base a commodities: un traje a medida para la producción de la región que aún está en plena costura. La fórmula no es una quimera pero sí exige una construcción basada en decisiones políticas acertadas que permitan convertir las ventajas comparativas de una región en oportunidades competitivas.

“La producción alimentaria en esta vasta área de la Argentina puede ser elaborada basándose en pymes con desarrollo de tecnología”, señaló Andrea Zanlari, el presidente de la Cámara de Comercio de Parma, un poderoso referente de un sector que hace escuela en este sentido.

El empresario indicó que la región de Parma tiene una profunda historia alimenticia basada esencialmente en la tecnología y en una premisa filosófica: mantener los productos según la tradición amplicándoles innovación para garantizar seguridad y calidad. “Es el secreto de Parma, es una lección que fue tomada dentro de la Universidad de Parma en el 1700 y continúa en estos días”, reflexionó Zanlari, quien participó de la Fiar 2007 y mantuvo un encuentro con el intendente Miguel Lifschitz y funcionarios de la cartera de Producción y llegó a Rosario invitado por la Cámara de Comercio Italiana local.

Afianzar acuerdos

Aunque Parma y la región de la Emilia Romagna están hermanadas con Rosario, el sector empresario de ambas regiones y el gobierno municipal intentan afianzar esos lazos a través de acuerdos comerciales concretos.

En ese sentido, Zanlari explicó que siguiendo este modelo de innovación y tecnología aplicada a la alimentación las pymes pueden tener más presencia en el mercado externo a través de acuerdos con sociedades de Parma.

El empresario consideró que las políticas de cierre de mercados “debilita a las empresas en el ámbito internacional”. Si bien evitó pronunciarse directamente sobre el camino que transita el gobierno argentino en ese sentido, consideró que “cuanto más libre y abierto es el mercado se crean más oportunidades para las empresas”.

Según el empresario italiano, el crecimiento del sector agroalimentario está condicionado por dos factores: por un lado la aceptación, “ya que es necesario que que un producto guste en el mercado” y en segundo lugar el crecimiento en calidad. Con lo cual “si si están cerradas las fronteras se arriesga a las empresas”, dijo.

Este modelo italiano tan famoso por la promoción del sector pyme surgió de tomar y perfeccionar lo que estaba a mano. “Nosotros no tenemos una agricultura extensiva que permita hacer commodities, con lo cual hacíamos lo que podíamos y comenzamos a trabajar los productos y construimos la principal industria agroalimientia de Europa, partiendo de la elaboración de commodities como leche, trigo o carne”, resaltó para ejemplificar cómo la Argentina y la región tienen la oportunidad de dar el gran salto.

“Los commodities son por su naturaleza, producciones en masa, muy estandarizadas con elaboraciones simples y economía de logística”, dijo Zanlari, todo lo opuesto a lo que se produce en Parma. “Trabajamos sobre elaboraciones muy especializadas que llegan al consumnidor”, graficó pero también destacó que “las cosas nos se hacen en un día”.

Pero aunque hay mucho por transitar el empresario reconoció el trabajo que vienen realizando las pymes en la región. “Si uno mira esta feria (por Fiar), descubre que hay muchísimas pymes que están buscando abrirse al mundo, es impresionante lo que se ve y por eso necesitan el respaldo de instituciones como las cámaras de comercio para que el mundo las conozca”.

Al respecto recordó que a través de la Cámara de Comercio Italiana de Rosario una misión de empresas pymes argentinas viajaron a visitar para estar en contacto con emprendedores de Parma, en el marco del proyecto Marco Polo que intenta afianzar el proceso de internacionalización de las empresas argentinas y abrir el diálogo con sus pares italianas.

En ese sentido y en el marco de Fiar el empresario mantuvo encuentro con partners locales para trabajar en este objetivo. “Esto es como un casamiento, al principio puede parecer difícil pero cuando ve a los hijos en la escuela comprueba que es posible”, sentenció.