Conflictiva carrera en la fuerza

No es la primera vez que el nombre del oficial Claudio Alberto Kleiman aparece en las crónicas policiales, y no precisamente por su accionar en contra del delito. Estos son algunos de los episodios en los que estuvo involucrado:

l En septiembre de 1999, Kleiman y el cabo Mario Díaz patrullaban en un móvil del Comando y recibieron la denuncia de un taxista asaltado en Villa Manuelita. Los policías salieron tras los ladrones y en Spiro y Cepeda se cruzaron con dos adolescentes: Walter Caballero, de 19 años, y Andrés Velásquez, de 14, murieron bajo las balas policiales. Desde la fuerza se dijo que fue un enfrentamiento, pero los familiares de los chicos dijeron que los fusilaron. Y el tachero no los reconoció como sus asaltantes. El hecho se convirtió en un paradigma del gatillo fácil en la ciudad. En diciembre de 2004 los dos uniformados fueron sobreseídos por falta de pruebas.

l El 11 de junio de 2000, Luis Alberto Martínez, de 18 años, cayó muerto en Pueyrredón al 200. En el hecho fueron detenidos dos hermanos del muchacho y el cuñado. Hasta allí los había perseguido la policía desde la estación de servicios de Salta y Callao, comercio que el cuarteto había asaltado. En medio de la persecución hecha por el Comando apareció en acción Kleiman, quien en su auto particular y franco de servicio se había sumado a la búsqueda. El policía bajó de su vehículo, se paró tras un árbol y disparó contra los asaltantes matando a Martínez. Los familiares del joven muerto aseguraron entonces que Luis tenía 12 disparos en su cuerpo.

l En junio de 2006, el Tribunal Federal Oral 1 de Rosario identificó a policías provinciales y federales sospechados de cometer irregularidades al investigar casos de narcotráfico o asumir actitudes de tolerancia con el negocio ilícito. Entre los mencionados estaba Kleiman, a quien los jueces cuestionaron por "su capacidad funcional" en un procedimiento.