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 domingo, 24 de diciembre de 2006  
Cuidado con el descenso muchachos

Luis Alberto Yorlano / especial para Ovación

Es muy triste escuchar decir a los apesadumbrados hinchas de los equipos grandes de la ciudad "no me interesa salir campeón, me preocupa el descenso". Todo se está cumpliendo de manera muy parecida a la etapa cuando perdieron la categoría. Esta teoría usted ya la leyó en este espacio. Los clubes primeros se van al descenso económicamente y luego futbolísticamente. Los dos están convocados, con serios problemas para incorporar jugadores por las constantes inhibiciones que llegan de todos lados. Para poder cumplir con estos compromisos hace que sus planteles tengan serios problemas de cobranza.

En Rosario Central las cosas se saben un poco más, mientras que en Newell's es muy difícil conocer su situación. Pero los dos están seriamente comprometidos con su futuro económico financiero y futbolístico.

Los jugadores que se destacaron en esta temporada que culmina, están más afuera que adentro del equipo. En el caso de Marcos Rubén y Cristian Villagra se hace casi imposible evitar su transferencia. ¿Cómo se puede frenar la venta del lateral, cuando en los equipos que quieren incorporarlos ganarían 750 mil pesos anuales, teniendo en cuenta que su sueldo actual es de 5 mil pesos por mes? Hoy ellos y los representantes cuidan su futuro. El mejor ejemplo es el de Gago, flamante refuerzo del Real Madrid, que habría renunciado al 15 por ciento que le corresponde por el estatuto del jugador para que a Boca llegara la cifra que pedía y así él asegurarse el futuro.

Es cierto que las ventas le da un poco de oxígeno a los inversores. No sólo tuvieron que cumplir con lo pactado, sino que debieron asumir otros compromisos, como por ejemplo, pagar las deudas asumidas por el licenciado Pablo Scarabino antes de la firma de convenio, y además tener que pagar al plantel cuando amenazaban con no concentrar cuando el equipo venía acumulando puntos importantes para el promedio.

Es importante recordar los desaciertos del licenciado presidente Scarabino al no vender a Chirola Ledesma, a Pablo Vitti y Andrés Díaz. Hoy estos jugadores disminuyeron su valor de venta por la irregularidad futbolística.

Se hace difícil sugerir cuál es la manera adecuada de manejar la tesorería sabiendo que el dinero no proviene de los recursos genuinos de fútbol. Pero ha llegado la hora de empezar a sacar cuentas de los puntos que necesitan para tener un 2007 controlado.

Rosario Central casi cumple su objetivo de llegar a los treinta puntos. El equipo, sin deslumbrar y después de haber pasado momentos complicados entre el plantel y el técnico, medianamente encontró su rumbo. Lo ideal sería producir los menos cambios posibles, vender lo mínimo necesario y que los que se incorporan sean mejores que los que tiene en su plantel. Basta de traer jugadores que solo hacen beneficencia con el entorno del fútbol que vive muy bien, por las cosas que hacen muy mal algunos dirigentes.

Las cosas en Newell's están bastante complicadas. El equipo terminó mal. Con su técnico desbordado por las necesidades de sacar puntos y descontrolado por la falta de respuestas de sus jugadores. Muchos de ellos le confiaron a Ovacion que no lo entendieron. El momento que se debe asumir no tiene margen de error. En lugar de buscar un club para colocar a Cardozo, deben encontrar la forma de retenerlo y de esa manera tener los goles necesarios para escapar del descenso. Lo mismo tendrían que hacer con Villar. Con estos dos jugadores, y como bien dice Pumpido al avisar que necesita dos volantes, pueden encontrar lo que le faltó en el Apertura. La permanencia en primera debe ser el único objetivo. No hay otro negocio que lo supere en el fútbol.

Cuando Gallego conseguía el campeonato por ninguna cabeza rojinegra pasaba la palabra descenso. Hay que sacársela de encima.

Y existe una sola manera. Dejando

los mejores y que las incorporaciones sean verdaderos refuerzos. l
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