Una solemnidad similar a los honores de Estado

La misa fúnebre de Augusto Pinochet tuvo un sorprendente marco de solemnidad, que en los hechos se convirtió casi en un responso de Estado. El gobierno determinó no brindarle funerales de Estado como ex presidente ni decretar duelo nacional, ya que Pinochet "divide al país". Sin embargo, fuera del protocolo de funerales como ex jefe del ejército (que fue el acuerdo entre el Ejecutivo y la rama castrense), estuvieron presentes los comandantes en jefe del ejército (y su plana mayor), de la armada, de la aviación y de la policía uniformada. Además estaba presente el cuerpo de Granaderos, que son la exclusiva escolta presidencial en los desfiles de los días 18 y 19 de septiembre, cuando se celebran las fiestas patrias. A muchos les sorprendió ver sobre el féretro, además de la bandera chilena y los símbolos de poder como ex jefe del ejército, la banda presidencial que usó el ex dictador. Al parecer, este símbolo fue puesto por sus hijos.