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 sábado, 25 de noviembre de 2006  
Santángelo le apuntó a Guillaume

Como en otras oportunidades, Central Córdoba se quedó con un gusto amargo en la boca por dejar escapar dos puntos valiosos. Quien no pudo disimular su bronca fue el entrenador charrúa Oscar Santángelo, que descargó su enojo apuntando al árbitro por un par de fallos que consideró determinantes en el resultado.

No habían transcurrido demasiados minutos desde que el siempre polémico Gabriel Gillaume dio por concluido el partido que Santángelo salió presuroso del vestuario y cruzó la puerta que comunica a ese sector con la calle Virasoro. Pese al malestar, se detuvo para hablar con la prensa y expuso las razones de su enojo.

El director técnico estaba muy caliente con el juez del cotejo porque consideró que el gol de Leandro Armani sobre el final, cuando igualaban 1 a 1, estuvo mal invalidado y señaló que el goleador fue habilitado por un cabezazo de un defensor visitante.

Además sostuvo que la igualdad de Verino llegó en el cuarto minuto de descuento cuando Guillaume había adicionado solamente dos.

Santángelo dejó por un momento de lado sus críticas hacia el juez y resaltó el desempeño de su equipo, que no tuvo a cuatro de sus habituales titulares (Bezombe, Farré, Raponi y Jorge Del Bono) y que terminó jugando con varios pibes como Del Mastro, Wilhem y Canuto.
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