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domingo,
03 de
septiembre de
2006 |
Dos tramas
con cuerpo y alma
Cuando Oscar Martínez escribió "Días contados" pensó en Cecilia Roth para encarar el desafío de estar en escena desde el principio hasta el final de la obra. Su personaje, una dramaturga reconocida, le cuenta al público tirando abajo la cuarta pared escénica una parte de su historia con sus vínculos más cercanos. "Es un personaje que me costó horrores -afirma Cecilia- porque exige estar de entrada y hasta el último segundo con un discurso muy sostenido, repleto de idas y vueltas entre su relato y las propias vivencias que recuerda". En tanto, en "Sofacama", el desafío planteado por el director Ulises Rosell fue presentar a una Roth muy diferente a la de corte almodovariano en la que se mostró la actriz en muchas oportunidades. Es el rol de una madre argentina post crisis devaluatoria que enfrenta las vicisitudes típicas en la relación
con su hijos adolescentes en
contacto con una "invitada" que le rompe todos los esquemas.
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