Cuando todo el universo esté en internet

Llegará el día en que todo lo que pase sobre la faz de la Tierra aparezca en alguna página web. Sólo será cuestión de saber buscar y en el navegador de internet estarán el presidente en su despacho, el colectivo del que bajamos hace unos minutos o nuestro vecino paseando el perro.

En algún momento determinado, a todos los internautas se les cruza esa idea por la cabeza, aunque sea una vez. La irrupción de la web en nuestras vidas y su crecimiento exponencial hacen "sospechar" que, algún día, la red será infinita y que todo suceso de la vida real podrá ser espiado tan sólo con una PC, un módem y una conexión. ¿Fantasía o un futuro posible?

No muchos días atrás, las cámaras web del gobierno de la ciudad de Buenos Aires mostraban una Diagonal Norte poco habitual: vallas de seguridad, el tránsito cortado, patrulleros y policías por todos lados. Quince minutos después la noticia llegaba a la televisión con el anuncio de "último momento": alguien había arrojado una molotov contra la Casa de Gobierno. En silencio, internet había dado la primicia.

Hace un par de meses, un estadounidense instaló en el árbol de su patio una webcam a la espera de que un águila que allí había anidado diera a luz a sus crías; calculan que unas diez millones de personas vieron en directo el parto. En www.fotolog.com hay miles de internautas que suben las imágenes de su casamiento, sus vacaciones, los primeros pasos de sus hijos o un encuentro fortuito con una estrella de TV, apenas horas después de que esas cosas ocurran.

Es un ejercicio fascinante abrir por primera vez el programa de navegación por mapas satelitales Google Earth y encontrar el hotel donde pasamos aquellas vacaciones inolvidables o el techo de tejas rojas de algún pariente en alguna ciudad perdida en medio de la nada. Da la impresión de que el mundo se hubiese empequeñecido. En http://mapas.buenosaires.gov.ar hay un sistema que combina planos, fotos aéreas y todas las fachadas de edificios y casas de Buenos Aires. Todas. La pregunta no se demora: ¿cuánto tardará internet en tener esas mismas imágenes en tiempo real?

Hacía dos horas que Zinedine Zidane había metido el cabezazo descalificador que puso fin a su carrera futbolística. En www.youtube.com ya había al menos diez videos de chicos que parodiaban el momento. En esa misma web hay cortos documentales, mascotas haciendo el truco que acaban de aprender, actores en el supermercado y modelos en la peluquería, el nieto al que los abuelos todavía no conocen personalmente, video clips que hace diez años no aparecen en MTV, animaciones con peluches, un encuentro cara a cara con un gorila en Ruanda y una colorada de ojos verdes dando testimonio de la importancia de YouTube en su vida. En un comentario posteado, Bulldogpd le responde en rudimentario inglés: "Sos muy linda, no hables más".

El primero que se aburra de internet que levante la mano. Hace quince años poníamos cara de entender poco cuando leíamos sobre "la supercarretera de la información". Hace diez años teníamos dudas sobre si era seguro ingresar nuestros datos para anotarnos en un tal Hotmail. Hace cinco años no habían aparecido los blogs, fotologs o videoblogs; hace unos días Blogger llegó a los 50 millones de diarios on line. ¿Cuál es el límite de este monstruo sin cabeza? El techo todavía no se ve, y el futuro parece sugerir que no habrá límite alguno.