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miércoles,
09 de
agosto de
2006 |
El gobierno hace caso omiso a la señal de acercamiento dada por Uruguay
Argentina reiteró su
rechazo a un monitoreo
conjunto a las papeleras
Dijo que, de lo contrario, el país "se vería forzado a tolerar la planta y la tecnología unilateralmente elegida"
El gobierno nacional rechazó formalmente ayer la propuesta de Uruguay para realizar un monitoreo "permanente y conjunto" en relación con las dos plantas de celulosa que se erigen en Fray Bentos porque -argumentó- implicaría convalidar "un acto ilícito" como es, para Argentina, la construcción de las papeleras.
Días atrás el canciller oriental, Reynaldo Gargano, envió a su par argentino Jorge Taiana una carta en la que propuso un monitoreo "permanente y conjunto de los dos países de la calidad de la aguas del río Uruguay" cuando estén operando las procesadoras de pasta celulósica. Ayer Taiana respondió la misiva en forma negativa, posición que ya había sido adelantada cuando se tuvo conocimiento del ofrecimiento.
De este modo el acercamiento a Argentina que intentó Uruguay a través de esa propuesta sufrió un traspié ante la negativa argentina, máxime si está en plena sustanciación el juicio que ambos países mantienen en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
La iniciativa del gobierno de Tabaré Vázquez se centra fundamentalmente en "las consecuencias que en el futuro pudiera tener en dicha calidad el funcionamiento de dos plantas industriales" de celulosa proyectadas sobre el recurso pluvial compartido.
El vicecanciller Roberto García Moritán fue el encargado de entregarle ayer a Gargano la respuesta de Taiana, que deja en claro que aceptar la propuesta implicaría convalidar un "acto ilícito" en contra de la Argentina al aceptar las plantas como un "hecho consumado".
Fuentes oficiales indicaron que Taiana señaló que el planteo del gobierno del Frente Amplio entra en contradicción con lo referido por la Corte Internacional de Justicia de La Haya en su última resolución.
"Nuestro país se vería forzado a tolerar la planta y la tecnología unilateralmente elegida", explicaron fuentes de la Cancillería, que sostuvieron que son "factores no determinantes del prejuicio que, como se demostrara ante el tribunal internacional, los emprendimientos causarán al río Uruguay y a sus áreas de influencia, incluyendo la salud y el bienestar de los habitantes de las comunidades circundantes a ese recurso fluvial".
Según trascendió, el canciller reafirmó "la continuada disposición de la Argentina a cooperar con Uruguay" en el seno de la Comisión Administradora del Río Uruguay (Caru) para la realización de las actividades orientadas a "asegurar los mas altos estándares de calidad de todo el río Uruguay y sus áreas de influencia".
En la misiva a Gargano, Taiana consideró que la cooperación propuesta por Montevideo "debe realizarse de plena conformidad con el Estatuto del Río Uruguay y las normas de derecho internacional sobre medio ambiente".
En ese contexto, el lunes Taiana se había vuelto a reunir con los abogados asesores y representantes de la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Gualeguaychú y el gobierno de Entre Ríos con el objetivo de continuar con la elaboración de la posición que llevará Argentina ante la Corte Internacional de La Haya en enero próximo, en el marco del juicio que ese tribunal lleva adelante por el daño ambiental que causarían las papeleras que se están instalando en el río Uruguay. Del encuentro participó el presidente del Caru, Hernán Orduna.
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Fotos
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El canciller Taiana redactó la carta de rechazo.
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