Saquearon las instalaciones de un motel vacío

Amparados en la noche, se fueron de trampa a un albergue de la avenida de Circunvalación. No se sabe si hubo pasión o romanticismo, pero se cree que estuvieron más de dos horas y no limitaron su estadía a una sola habitación. Eso podía verse en el desorden que encontraron los policías al entrar antenoche, cuando durante un patrullaje de rutina encontraron forzado el portón del motel. Todo indicaba que al menos un par de tramposos habían visitado "El Gato Negro" pero para satisfacer necesidades diferentes a las sexuales. Es que desde hace un mes ese sitio no funciona como refugio para amantes. Sin embargo, como al cierre de esta edición todavía no se había denunciado ningún robo, la policía no podía determinar faltante alguno, aunque el lugar tenía toda la apariencia de haber sido saqueado.

Ayer a la tarde, el personal de la subcomisaría 21ª seguía intentando contactar al dueño del establecimiento para intentar esclarecer lo que en principio tenía todas las señales de haber sido un escruche.

Según contaron fuentes de la seccional del barrio 7 de Septiembre, el aparente robo fue descubierto casualmente por efectivos que patrullaban la zona, a quienes les llamó la atención divisar que uno de los portones de ingreso para autos estaba forzado. "Se actuó de oficio, porque hasta ahora no pudimos ubicar al dueño y nadie hizo la denuncia", explicó un vocero.

Las primeras versiones sobre el robo indicaban que se habían llevado todos los televisores de las 30 habitaciones. Sin embargo, eso no podía ser aseverado por los policías, que no sabían qué había en el alojamiento antes de que ingresaran los supuestos ladrones. "No se sabe exactamente qué había o qué se robó", explicó el vocero consultado, y añadió que al igual que el portón de ingreso también había otras aberturas en el interior del edificio que estaban forzadas.

Mientras se trataba de ubicar al dueño del motel para intentar aclarar el panorama, la policía no descartaba que los intrusos hayan ingresado a la madrugada, aunque no podían asegurar cuándo. "Ese lugar está cerrado desde hace un mes, no sabemos por qué, y no cuenta con vigilancia. Los intrusos pueden haber entrado ayer o hace dos o tres días", especulaba el vocero consultado.