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domingo,
16 de
julio de
2006 |
Política y furia
en el Senado
Rodolfo Montes / La Capital
"Soberbios, intolerantes, paranoicos, antidemocráticos, mentirosos, arbitrarios", fueron sólo algunas de las diatribas que cruzaron el oficialismo y la oposición radical en el recinto del Senado, en la madrugada del miércoles pasado. También el monobloque socialista recibió el ametrallamiento de la senadora Cristina Fernández de Kirchner: "¡Miente, miente, miente, que algo quedará!", le disparó la primera dama a Rubén Giustiniani, aludiendo a Joseph Goebbels, ministro de Propaganda de Adolf Hitler.
Terminaba de detallar una serie de ordenanzas municipales donde supuestamente el Ejecutivo de Rosario se arroga el uso discrecional de unos 71 millones de pesos, sobre un presupuesto anual de 580. Ejemplo análogo, según Cristina de Kirchner, a la ley de superpoderes que se estaba votando en ese momento. El jefe de Gabinete, con la nueva ley, tendrá intervención sobre unos 15 millones del presupuesto nacional, que supera los 100 mil millones.
"No tiene pertinencia ni seriedad, desde la técnica económica, comparar los «fondos específicos» del presupuesto municipal con los superpoderes que va a manejar jefe de Gabinete. No es equiparable, ante todo, por la cantidad de dinero, 70 millones contra 15 mil millones", le dijo a La Capital Sergio Arelovich, especialista en presupuestos, consultor y docente de la cátedra de Economía Política de la Facultad de Derecho de Rosario.
Sin embargo, la furia que desplegó la primera dama contra socialismo no registra antecedentes en el Senado. "El titular del partido que gobierna esa municipalidad (Rosario) y que, reitero, lo ha hecho exitosamente -está a la vista por los resultados de las elecciones- lo ha hecho utilizando herramientas administrativas operativas, inclusive de mayor envergadura que las que estamos solicitando nosotros", reiteró Cristina Fernández. Y le replicó a Giustiniani: "Dice que el gobierno va a poder manejar a gusto y placer cien mil millones de pesos, ¿por qué miente -por Giustiniani- de esa manera?", se preguntó, incendiada de bronca, Cristina.
En realidad, la afirmación "otorgándole al jefe de Gabinete la facultad de libre asignación de alrededor de $100.000 millones anuales" es parte de la declaración de la Comisión de Acción Política del PS, que se reunió en Buenos Aires un día antes de la sesión en el Congreso.
El PS, en este caso, cayó en una acusación genérica y poco rigurosa: La ley de superpoderes no habilita al jefe de Gabinete a la "libre asignación" de la casi totalidad del presupuesto. La declaración socialista, en ese sentido, fue un aporte más a la confusión general, y a la profusión de agravios en el recinto.
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