Tabaré sólo hablará con Kirchner después del fallo de la Corte de La Haya

El presidente uruguayo también espera que el Mercosur se expida por el bloqueo que afectó a su país

El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, ratificó ayer su disposición "a dialogar" con su par argentino Néstor Kirchner, pero aclaró que ese encuentro sólo debería realizarse luego del pronunciamiento de la Corte de La Haya "para ver como continúa" la relación bilateral.

"El conflicto entre Argentina y Uruguay por el tema de las plantas de celulosa, por resolución del gobierno argentino, se está dilucidando en el tribunal de La Haya en primera instancia y en el tribunal de solución de controversias del Mercosur. Vamos a esperar el resultado", afirmó Vázquez.

En los últimos días, la tensión entre Buenos Aires y Montevideo pareció distenderse a partir de las declaraciones del gobierno de Vázquez en el sentido de restablecer el diálogo con la Argentina.

Incluso, desde Montevideo se encargaron de despejar las dudas sobre la presencia del presidente uruguayo en la próxima cumbre de jefes de Estado del Mercosur a celebrarse los días 20 y 21 de julio en la provincia de Córdoba.

Reynaldo Gargano participó en Buenos Aires de la reunión de cancilleres del bloque que aprobaron el ingreso de Venezuela al Mercosur, en la que planteó los efectos negativos de los cortes de rutas y puentes en Entre Ríos, aunque casi como una formalidad.

Tabaré Vázquez se manifestó "dispuesto a dialogar" con Kirchner "sobre la base de estos principios", es decir, esperar el pronunciamiento de los tribunales internacionales "para ver como continúa el relacionamiento entre los gobiernos de Argentina y Uruguay y entre los pueblos de estos países".

"El tema específico de las plantas se resolverá por la vía jurisdiccional como lo pidieron ambos gobiernos", aseguró el mandatario uruguayo, en alusión al pronunciamiento del tribunal internacional, dispuesto para el próximo mes.

Acerca de las advertencias sobre medidas de fuerza que podrían retomar en Gualeguaychú, Vázquez señaló que "por más que corten los puentes, la resolución que tomamos la hemos tomado".

"Podrá variar, dependiendo de la solución jurisdiccional, pero ninguna presión nos va a hacer cambiar de opinión", advirtió.

En esa misma línea, sentenció que "Uruguay no es una provincia de ningún país. Es un país libre, independiente y soberano", y "éste o cualquier gobierno que venga va a defender esta situación. Vamos a defender a toda costa la soberanía de nuestro país", aseveró.

"Espero que prime la cordura y que de una buena vez por todas comprendamos que en el caso de Uruguay, estas acciones no nos van a hacer apear de lo que la inmensa mayoría de los uruguayos apoya", enfatizó Vázquez.

El martes a la noche, dirigentes de la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú rechazaron enérgicamente las propuestas del canciller uruguayo Reynaldo Gargano, quien sugirió a la Argentina dialogar sobre la base de acordar un monitoreo compartido en las plantas de celulosa que se construyen en Fray Bentos.

En la reunión de la Asamblea realizada en el teatro de Gualeguaychú, el dirigente Oscar Bargas dijo que "si Gargano quiere empezar a hablar, me imagino que será sobre cómo se desarman las plantas", y advirtió que se debe tener "mucho cuidado con lo que esta impulsando la Cancillería argentina sobre el control de las plantas".

Por otra parte, se aprobó la realización, el próximo sábado, a las 12, de una marcha en la costanera de Gualeguaychú para apoyar a grupos de ambientalistas y vecinos chilenos que se oponen a la instalación de una papelera.

Orgullo charrúa. "Uruguay no es provincia de ningún país", atacó Vázquez.