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domingo,
23 de
abril de
2006 |
"Tendremos que
acostumbrarnos"
El presidente del Ente Turístico Rosario (Etur), Juan Nyffenegger, consideró que tras los dos años de promocionar a Rosario en el resto del país, "los rosarinos se tendrán que ir acostumbrando al miniturismo, sobre todo los fines de semana largos y feriados", y estimó que la sobredemandada plaza hotelera deberá esperar al desarrollo de nuevos proyectos hoteleros para acomodarse en el tiempo. Por lo pronto, el funcionario destacó que en la actualidad la ocupación promedio anual "ronda el 70 por ciento de la capacidad real".
Nyffenegger se dijo optimista frente al aluvión de turistas esperado para el próximo fin de semana. "Ya no hay disponibilidad hotelera, pero están anunciados varios proyectos que aumentarán la capacidad de Rosario", indicó, para asegurar que "la gente seguirá viniendo a Rosario porque se va conforme, más allá de estos picos de demanda y la escasez de alojamiento".
Para la oficina del Etur, el efecto traccionador de las promociones de la ciudad como destino a visitar trajo un "razonable" período de saturación. "Estamos terminando una etapa de consolidación, pero el desafío pasa por mejorar la oferta con nuevas inversiones", planteó a futuro.
Los servicios públicos son un tema excluyente para terminar de posicionar turísticamente a la ciudad. En este punto, el titular del Etur señaló que "los taxis, remises y colectivos deben colaborar con la mayor cantidad de unidades posibles", al igual que la gastronomía y la oferta cultural.
Por lo pronto, el funcionario se mostró confiado en amortiguar el aluvión de turistas con la oferta hotelera de Funes, San Lorenzo, Arroyo Seco, Ricardone y otras localidades del área metropolitana.
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