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domingo,
16 de
abril de
2006 |
Una larga historia que no tiene final
Los archivos de los enfrentamientos entre barrabravas canallas reflejan heridos, detenidos y muertos
Las barras bravas existen en todos los clubes del fútbol argentino y perduran gracias al sostén que reciben desde sectores de mayor poder. En Central, esta es la crónica que construyeron hasta ahora:
18.10.96: Sergio Enriotti, conocido como el Cabezón Sergio, fue asesinado por su novia Graciela Noemí Strembel. En la casa del barra la policía halló un cheque por un monto de 500 pesos, impreso con los nombres del ex presidente Víctor Vesco, del ex vice Roberto Gastaldi y del ex tesorero Roberto Muñoz, y firmado por Vesco y los ex directivos De Felice y Mendoza.
23.9.97: Mario Eduardo Lartigau, de 23 años, irrumpió en la madrugada de ese día, junto a otros barrasbravas centralistas, en la vivienda de una villa de emergencia ubicada en Estados Unidos 2349. Tras discutir con Alfredo Mansilla, el dueño del inmueble, Lartigau comenzó a disparar provocando la muerte de Matías Mansilla de apenas 9 meses. Lartigau se reunió la noche de ese día con un grupo de barras canallas que habían regresado de la Capital Federal luego de presenciar el partido entre los canallas y Ferro. Según la policía, el grupo fue a la casa de Mansilla a buscar droga y allí se produjo una discusión que culminó con la muerte del bebé. Lartigau fue condenado por el juez de sentencia José Manuel Casas a diez años y seis meses de prisión. Entre los detenidos estaban Juan Alberto y César Bustos, los hijos del Chapero.
Junio de 1998: Andrés Pillín Bracamonte fue baleado en el parque Urquiza en un hecho que fue presentado como un robo.
Julio de 1998: Daniel Enrique Dani Paz y Sergio Olivetto fueron heridos de bala en un bar de Cafferata y Mendoza tras una gresca entre parroquianos. Tanto Paz como Bracamonte fueron denunciados en 1996 como autores de extorsiones a dirigentes para obtener dinero y entradas de favor. Ambos fueron sobreseídos.
31.10.99: el 2 de febrero de 1994 un incendio destruyó una parte de la sede de Central. El siniestro fue provocado intencionalmente por Oscar Alberto Paquito Ferreyra, que fue arrestado segundos después de arrojar un bidón con nafta y un fósforo a una oficina contigua a la presidencia. El juez José María Casas procesó a Ferreyra por incendio agravado por poner en riesgo los bienes del club y las vidas de las personas. El juez Alberto González Rímini lo condenó a 4 años y 6 meses de prisión.
17.3.2000: Un hincha que, según dijo había ido a adquirir una entrada en la puerta de la sede de Mitre al 800, fue herido por un joven que le descerrajó tres disparos y escapó corriendo. Jorge Mocciaro, de 38 años, recibió un balazo en un glúteo. Ese día Pillín y el Chapero fueron vistos merodeando por las oficinas del club. El ataque se produjo a 36 días de un hecho idéntico en el mismo sitio: esa vez un tiro había atravesado el ventanal del bar Junior, donde estaban reunidos dos barrabravas. La policía consideró que fue un atentado contra uno de los líderes de la barra.
9.9.2000: Hugo Bernardo Taborda, conocido como el Sapo e integrante de la barra canalla, fue hallado agonizante en Esmeralda y Presidente Quintana, pero llegó muerto al Heca.
6.11.2000: El crimen de Taborda derivó en un violento incidente en los tribunales cuando sus hermanos atacaron a tiros a los familiares y el abogado de Luciano Cesar, uno de los acusados. Uno de los tiros se estrelló contra el vidrio de la oficina de un sumariante y otro pasó cerca del abogado jose Luis Abichain Zuain.
6.3.2002: El proyectil que hirió al cabo César Miguel Juárez, en el clásico del 11 de noviembre del 2001, estaba dirigido a Juan Carlos Bustos. La revelación la hizo Leopoldo Martín Martínez, alias Pitito (detenido por el ataque) ante el juez de instrucción Eduardo Suárez Romero.
22.3.2006: El líder de la barra de los Pillines, Andrés Bracamonte, amplió su testimonio como víctima de la agresión a balazos que sufriera el 3 de marzo último y la investigación seguiría apuntando a una interna entre grupos de la hinchada de Central. Pillín, el líder de uno de ellos, habría deducido ayer que intentó matarlo un sicario contratado por miembros de la banda rival. Recibió cuatro balazos.
5.4.2006: Oscar Paco Ferreyra, uno de los líderes de la barrabrava canalla, fue procesado por lesiones leves y amenazas coactivas, pero zafó de la acusación más grave en su contra: la de tentativa de homicidio de un chico de 13 años, al cual está acusado de apuñalar durante una reyerta ocurrida el 1º de febrero poco antes de un partido entre Central y Boca.
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