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domingo,
16 de
abril de
2006 |
Recuerdos y afectos
A la distancia José Cohen no pierde de vista el que fue su grupo de compañeros con quienes tejía quimeras mientras tomaban café frente a la facultad. O las noches sin dormir antes de los exámenes y los teóricos fructíferos a pesar de las condiciones edilicias poco favorables y con limitaciones de material pedagógico. Entre los compañeros de residencia recuerda a Domingo Cera, "un clínico excelente, una persona fantástica que las estructuras rechazan porque no están preparadas para recibir a un buen tipo".
No sólo la tecnología seduce a José. Lo apasiona el cine, donde lo sigue conmoviendo "Cinema Paradiso" como la primera vez. Lee novelas históricas y escucha la música de los años 70 y 80 que lo vieron crecer, como U2 y The Police. Hincha de Newell's suele cantar el gol por teléfono junto a su familia porque en Jerusalem los domingos pasan un partido del fútbol argentino en directo. Quizás una forma de entender por qué José viene y va de la técnica a la vida, de la pasión a la ciencia.
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