Incomunicados. La crisis según la óptica de un asambleísta de Gualeguaychú

"Botnia compró la soberanía de Uruguay"

Pérez Molemberg dice que en Fray Bentos apoyan la radicación de las papeleras por falta de información

Daniel Pérez Molemberg es uno de los asambleístas más activos entre los ambientalistas de Gualeguaychú, que volvieron a cortar el puente tras el fracaso del diálogo binacional por la crisis de las papeleras. "Hay una gran bronca contra Botnia" por no haber parado los trabajos, le asegura a La Capital. Luego dice que la firma finlandesa, además del terreno para instalar la planta, compró la soberanía de Uruguay.

Molemberg es un mecánico dental porteño, que junto a su mujer (dentista) y sus hijos, se radicó en Gualeguaychú en procura de tranquilidad y para alejarse de los secuestros exprés. "Hace tres años que llegamos y a los cuatro meses ya estábamos luchando arriba de un puente por la vida que vinimos a buscar", reflexiona.

Los gualeguaychuenses buscan "prevenir antes de que sucedan las cosas", afirma, aunque no logra desentrañar "cómo surgió la concientización en los habitantes". Molemberg compara a Botnia con La Forestal y asegura que la actitud favorable a las papeleras en Fray Bentos se debe a la desinformación que existe en Uruguay sobre el tema. Si bien afirma que se sienten respaldados por el gobierno nacional, no deja de criticar a Aníbal Fernández por sus declaraciones contrarias al corte de ruta.

-¿Qué sensación hay en Gualeguaychú por el fracaso de la cumbre presidencial?

-De gran bronca contra la empresa Botnia, porque nosotros nos apartamos de la ruta para que los presidentes puedan negociar. Ahora esa bronca se canalizó volviendo a cortar la ruta, y esperamos que el gobierno argentino mantenga la posición que Gualeguaychú le encomendó: hacer el estudio de impacto ambiental y paralización de obras por 90 días, entre otras cosas.

-¿Se sienten respaldados por el gobierno nacional?

-Nos sentimos acompañados por el gobierno. Aunque hay cosas que necesitaríamos y nos dicen que no pueden ser, como, por ejemplo, estar al tanto del acuerdo que se pretende firmar con Uruguay. Está bien que haya secreto de Estado, pero necesitamos compartir la estrategia del gobierno porque forma parte de nuestros intereses.

-¿Le molestó que Aníbal Fernández haya dicho que el gobierno nunca estuvo de acuerdo con los cortes de ruta?

-Esto no es sólo la defensa de intereses, acá está el corazón involucrado en esos intereses. Somos trescientas mil personas que estamos alerta y sufriendo por esta situación. No se le puede pedir a Gualeguaychú que no corte la ruta, como dijo el ministro del Interior. ¿Quién puede tirar la primera piedra y decir Gualeguaychú no puede cortar la ruta porque no se lo merece? Gualeguaychú hizo todo lo que tenía que hacer para que se pueda dialogar, pero estas empresas lo único que hicieron fue prepotearnos, insultarnos y reírse de nosotros. Seguiremos con el reclamo pacífico porque tenemos razón.

-¿Qué opinión tienen del gobierno de Tabaré Vázquez?

-Este es un claro colonialismo moderno. Estamos como hace 500 años: viene el poder de la plata y el gobierno no puede hacer nada sobre su territorio. Lo que tratamos de comprender es por qué Uruguay actúa así. Vamos a esperar que Uruguay tome la manija de la situación, ya que hoy la tiene Botnia. Tabaré no sólo vendió un terreno, vendió la soberanía del país.

-Están decepcionados con la posición adoptada por Tabaré.

-Por supuesto. El discurso de Tabaré previo a las elecciones parecía del ambientalista más importante del mundo por cómo defendía el medio ambiente contra los capitalistas, pero cuando asume el poder hace todo lo contrario y está permitiendo que una empresa ponga en peligro la paz social de la región.

-¿Cómo analiza la posición pro Botnia de los habitantes de Fray Bentos?

-Es resultado de la desinformación de los uruguayos. Yo hago una comparación odiosa, en el 76 acá había secuestros, torturas y muerte pero muy poca gente estaba enterada. Por eso pasó lo que pasó. Estábamos desinformados y nos manejaban. Hoy en Fray Bentos no tienen acceso a Internet porque no pueden comprar una computadora, la información no existe. Además, allí Botnia hizo la comisaría, el hospital, les regala útiles a los chicos, pone publicidad en todos los medios de comunicación. Tiene un dominio absoluto.

-¿Botnia es como La Forestal en la década del 20?

-Es muy similar, y el desastre que van a dejar (las papeleras) lo van a llorar nuestros hijos y nosotros vamos a ser los responsables.

-Busti quiere hacer un plebiscito para conocer la opinión de los entrerrianos.

-Apoyaríamos un plebiscito si pregunta si los entrerrianos queremos o no las papeleras, para que sirva de antecedente. En Finlandia, para instalar una fábrica de papel, primero se consulta no sólo a los finlandeses, también a los ciudadanos de los países que puedan estar involucrados. Eso se repite un año después de que comienza a funcionar, y si los habitantes dicen que no, se tiene que ir. ¿Por qué no hacen eso acá?, porque Finlandia exporta toda la parte sucia y esconde su basura no debajo de la alfombra sino que la lleva a otro país. Y eso es lo que nosotros no debemos permitir que ocurra.