El agobio de la zona en palabras

El asalto de anteanoche en Madrid y Humberto 1º, en el que una joven resultó gravemente herida, no fue un hecho aislado para los vecinos que viven en ese sector de barrio Ludueña. Apenas observaron la llegada de los cronistas de La Capital, un grupo de diez o doce personas se acercaron para contar lo que sabían del hecho y también para describir la angustia vivida por lo que -denunciaron- fue una total falta de atención de las autoridades policiales. La oportunidad también sirvió para pedir mayor protección por la ola de robos que sufren cíclicamente en el barrio.

"Acá hubo en la misma manzana cuatro robos en una semana. Es un barrio muy inseguro. Todos en menor o mayor medida sufrimos algún robo. Algunos más graves, otros no tanto. Pero todo el mundo padeció un asalto en su casa o en la calle", remarcaron. En forma desordenada y dominados por la consternación por lo ocurrido con Griselda Digiácomo, contaron sus historias. Los vecinos dicen estar cansados de los reclamos y que en el barrio se necesitan soluciones que van más allá de una mayor presencia policial en las calles. "Hemos peticionado, incluso en reuniones con el intendente (Miguel) Lifschitz la apertura de calles y la mejor llegada de las líneas de transporte, pero nunca obtuvimos respuestas", aseguraron.

Por eso volvieron a organizarse para exigir soluciones. Por la tarde se llevaron a cabo dos reuniones, una en la misma esquina de Madrid y Humberto Primero y la otra en Camilo Aldao y Urquiza.