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domingo,
02 de
abril de
2006 |
Opinión: Un clásico con necesidades distintas
Luis Alberto Yorlano / especial para La Capital
Siempre se dijo que los resultados en los clásicos, fueron ilógicos. Y no es así. Lo han hecho ilógicos los acuerdos entre jugadores, los árbitros sacadores de partidos y muchas veces sus errores que determinaron resultados inmerecidos. Por estos motivos, los periodistas que no quieren quedar pagando ante su público, tratan de evitar que los lleve puesto un resultado adverso y por eso casi siempre cuando tienen que dar un pronóstico dicen empate. Pero si bien las necesidades pueden hacer variar un resultado y conseguirlo con un gran esfuerzo, afirmo que Newell's llega mejor que Central.
Los auriazules vienen soportando hace bastante tiempo problemas de todo tipo. En lo futbolístico no se reforzaron por dos motivos: por la falta de dinero para realizar buenas incorporaciones y por la incapacidad a la hora de elegir, y con respecto a esto último llegaron al club jugadores que en otras épocas no pasaban ni por la vereda del Gigante. En los institucional se han cometidos muchos errores, pero uno de tal gravedad que no figura en ninguno de sus antecedentes, que fue en aquella jornada posterior a la derrota frente a Argentinos, donde los barrasbravas subvencionados por la comisión directiva no tuvieron mejor idea que pegarle a los socios, después de abrir una puerta que daba a la platea, con total naturalidad
y ante la vista de 30 mil personas.
Me atrevería a afirmar que por todas estas cosas, Central casi tiene la obligación de ganar. Para salvaguardar el orden institucional y lo más urgente, ganar tres puntos para escapar de la Promoción. Viene de una derrota, que pudo ser goleada en el Monumental frente a River y de lesiones que
están minando el físico del plantel.
Pero hay algo que está intacto, la pasión de su hinchada y su aliento permanente que pueden ayudar
a que el equipo encuentre un
buen resultado a través del esfuerzo.
Por el lado de Newell's, las cosas se muestran distintas. Al igual que Central la necesidad de los tres puntos, pero en su caso para seguir en la lucha por la punta del Clausura. Pero en lo futbolístico, hay más técnica y se exterioriza cuando la pelota pasa por Ortega. Los segundos cuarenta y cinco minutos frente a Boca dieron muestra que en lo físico está bien. Ahora
sólo hay que esperar hasta esta tarde.
Me atrevo a decir que este debe ser el clásico más caliente de los últimos años. Si le toca perder a Central puede dejar secuelas muy difíciles de remediar, por lo expuesto y por las internas que en todos los niveles se viven en el club. Pero si gana, puede encontrar la bomba anímica, como solía decir el Bambino Veira, para encarar con más confianza
la Copa Libertadores, a pesar que
no depende sólo de sus resultados.
En tanto, una derrota a Newell's los podría sacar de la pelea por el título. Como se observa un clásico con necesidades distintas y en un
escenario donde la temperatura puede superar todo lo hasta hoy conocido.
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