Hierbas aromáticas

Un toque de aroma y color

Las hierbas aromáticas pueden cultivarse muy bien en macetas, lo que es un buen dato para quienes, aun teniendo poco lugar, les gusta condimentar con especies de su propia cosecha, o bien para quienes desean usarlas de forma decorativa disfrutando del color, perfume o flores de estas plantas.

En cuanto a los requerimientos, casi todas necesitan recibir algo de sol, preferentemente el de la mañana, contar con un suelo suelto, fértil y bien drenado. Para lograrlo es conveniente agregar arena y resaca para alivianar la tierra, agregar humus de lombriz y harina de hueso para fertilizar, y poner en el fondo de la maceta una capa de piedritas para asegurar un buen drenaje.

El riego no debe ser excesivo, como regla general hay que regar 2 veces por semana en invierno y 3 veces en verano (puede variar la frecuencia si reciben mucho sol o si el sitio es muy ventoso). Se recomienda siempre quitar las flores apenas aparezcan (en caso de que no se las utilice en forma ornamental) para que la producción de hojas sea mayor.

Algunas especies

Las plantas más comunes y fáciles de cultivar son el orégano, la menta, el ciboullete, el romero, el tomillo, la albahaca, la salvia y el perejil.

Orégano: planta perenne, mide entre 40 y 50 centímetros de altura y florece a fines del verano. Requiere suelos fértiles y bien drenados y una exposición a pleno sol o media sombra. Las hojas se pueden utilizar secas o frescas, una vez secas y desmenuzadas se pueden usar para adobar pizzas y salsas; frescas se usan para condimentar ensaladas. También se pueden congelar en el freezer durante 3 meses sin que pierdan sus propiedades.

Salvia: planta perenne, mide entre 60 centímetros y 1 metro de altura, sus hojas son de color verde grisáceo y tiene flores de color azul. Prefiere un lugar soleado y suelo bien drenado y suelto. Es mejor regarla recién cuando el suelo se haya secado. Las hojas se recogen a fines del verano y se dejan secar para usarlas en invierno. Sus hojas picadas se usan para condimentar pastas, carnes y pescados.

Albahaca: planta anual de aroma y sabor muy característico, mide de 30 a 60 centímetros de altura y tiene flores blancas que aparecen en el verano. Necesita media sombra o pleno sol, y suelos fértiles y bien drenados. Las hojas que se consumen secas o frescas, se pueden utilizar para condimentar ensaladas, salsas, pizzas y pastas.

Ciboulette: planta bulbosa, perenne, se usa tanto para cocinar como para adornar jardines. Es de la familia de los ajos y las cebollas. Necesita suelos drenados, fértiles y sol o media sombra. Sus flores son rosadas y aparecen cuando comienza el verano. Las hojas se pueden usar frescas o congeladas. Para congelarlas se pueden picar y ponerlas dentro de una cubetera de hielo, luego se agrega un poco de agua y se guarda en el freezer. Una vez congeladas se desmoldan y se ponen en algún recipiente dentro del freezer. Cuando se los precise, se pueden usar los cubitos para condimentar sopas o guisos.

Menta peperina: planta rizomatoza de 30 a 50 centímetros de alto, tiene flores lilas o blancas, es de fácil cultivo y rápido crecimiento. Se la puede utilizar para hacer té o para perfumar ensaladas o carnes.

Romero: arbusto de 1 a 2 metros de altura, muy ramificado, de hojas angostas y con flores azuladas (florece casi todo el año).

Jorgelina Rinaldi

Paisajista

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