San Luis al 900

Tiroteo en un ciber tras frustrado intento de asalto

Un policía que estaba en el local evitó el atraco pergeñado por un trío de ladrones. No hubo heridos

Un violento asalto se produjo ayer a la madrugada en el interior de un local de internet ubicado en San Luis al 900, en donde un trío de delincuentes primero se hizo pasar por cliente y, luego de ocupar durante casi tres horas otras tantas computadores, desenfundaron sus armas e intentaron apoderarse de la recaudación del negocio. Pero se toparon con un policía de civil que intentó detenerlos y entonces se produjo un tiroteo dentro del local que afortunadamente no causó heridos, aunque los maleantes lograron huir.

El hecho sucedió alrededor de las 4.30 en el ciber de San Luis entre San Martín y Maipú, en pleno microcentro de la ciudad. En ese lugar se encontraba Omar Dinucci, el propietario; un sargento primero de policía que vestía de civil porque estaba franco de servicio, y una cantidad no determinada de clientes.

Fuentes policiales contaron a este diario que los delincuentes eran personas de unos 20 años, que estuvieron frente a las computadoras navegando por internet entre dos y tres horas. "Al parecer esperaban el momento indicado para actuar", confió un vocero. Cuando llegó el momento de concretar el golpe, en el local se encontraba un sargento primero de policía.

Este suboficial es vecino de la zona y al parecer también amigo del titular del ciber. El policía, según coincidieron las fuentes, estaba franco, no vestía uniforme y estaba tomando mate sobre el mostrador. Nadie dijo si el agente sólo estaba compartiendo un momento o cubría algún servicio adicional. Lo cierto es que cuando los asaltante entraron en acción, Dinucci se encontraba en el baño. "Por eso no te puedo contar nada, porque no vi nada. Sólo escuché ruidos como de una pelea y enseguida un par de disparos. Por suerte no pasó nada y los tipos rajaron", fue la escueta versión que brindó el comerciante.

Por su parte, voceros de la Unidad Regional II indicaron que los ladrones desenfundaron un revólver calibre 38 largo y una escopeta calibre 16 de un caño y avanzaron derecho hacia la caja registradora. "En ese momento, el policía se identificó como tal y también esgrimió su arma reglamentaria. Entonces se produjo una pelea o forcejeo con un tiroteo dentro del local. Fueron tres o cuatro tiros", manifestó un portavoz.

Todo culminó con los maleantes huyendo por calle San Luis. El sargento, cuya identidad no trascendió, salió a perseguirlos, pero el trío logró escapar, despojándose de las armas. El revólver apareció tirado en la vereda y la escopeta dentro de un volquete. En cuanto a los ladrones, efectivos de la seccional 1ª, donde se investiga el hecho, indicaron que no había pistas firmes para atraparlos.