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sábado,
25 de
junio de
2005 |
No hay gran euforia
pero coparán la cancha
Los jujeños se muestran cautos pero todos ya tienen entrada
El optimismo desmedido que reinaba en Jujuy ya no es el mismo. La derrota de Gimnasia el último miércoles bajó la euforia de los hinchas, quienes confiaban ciegamente que sería un compromiso sin demasiados riesgos. Esto no significa que las esperanzas no sigan intactas. La mejor prueba es la avidez por conseguir una entrada para acompañar al Lobo. Es un hecho que el estadio 23 de Agosto, con capacidad para 23 mil espectadores, se presentará colmado.
"El partido no será fácil. A Gimnasia le está costando jugar de local. Le pesa la presión frente a su gente". La sabia visión de Viviano, un taxista jujeño, se refleja en las últimas presentaciones del equipo norteño.
Es cierto también que las urgencias por sumar puntos para conseguir el título del Clausura incidió en su bajo rendimiento. Ahora hay otra cuestión en juego. En las calles jujeñas todos hablan de la revancha y ansían que Gimnasia retorne al fútbol grande donde estuvo cinco años, tiempo que ningún otro equipo del interior -con excepción de rosarinos y cordobeses- pudo permanecer.
La duda es cómo responderá Gimnasia si el gol no llega pronto. "El problema es que la gente a menudo se impacienta y presiona a los jugadores para que ganen, lo que al final resulta negativo porque a ellos les cuesta asimilarlo", expresó José, fanático del Lobo.
Lo cierto es que los simpatizantes jujeños piensan que el 1 a 0 se puede revertir. Respetan a Tiro algo más después de la victoria en el primer enfrentamiento. Pero no dudan que la historia les sonreirá. "Acá los rosarinos la van a tener difícil", dijo Alberto. Es que toda Jujuy apuesta por un Lobo de primera.
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