Año CXXXVIII Nº 48733
La Ciudad
Política
Economía
Opinión
El Mundo
Información Gral
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Educación
Escenario


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 24/04
Mujer 24/04
Economía 24/04
Señales 24/04
Educación 23/04
Salud 20/04
Autos 20/04

contacto
servicios
Institucional

 viernes, 29 de abril de 2005  
En Gran Bretaña podrán crear embriones para salvar vidas
Los lores autorizaron la virtual concepción de bebés de probeta, para trasplantes de tejidos

La Cámara de los Lores, la máxima instancia judicial de Gran Bretaña, autorizó ayer a una pareja a concebir un "bebé de diseño" para tratar a un hijo con una enfermedad degenerativa.

Los científicos británicos podrán ahora seleccionar embriones humanos con tejidos sanos, para trasplantarlos a Zain Hasmi, un niño de seis años y oriundo de Leeds, en el norte de Inglaterra, que sufre de la enfermedad sanguínea beta thalassaemia mayor.

La presidenta de la Autoridad británica de Fertilidad Humana y Embriología (Hfea, por sus siglas en inglés), Suzi Leather, señaló que la decisión fue tomada luego de analizar los avances de la ciencia en los últimos años, a fin de poder ayudar a "un pequeño número de familias con niños muy enfermos".

Leather precisó además que la medida no se aplicará en forma generalizada, sino que "se estudiará cada caso".

El proyecto era debatido desde mayo pasado y la resolución fue aplaudida por la comunidad científica, pero recibió duras críticas por parte de varios grupos autodenominados "defensores de la vida", que consideran que con esta medida se utiliza a los bebés "como tratamiento".

En este sentido, Jack Scarisbrick, presidente de la organización Life (Vida), advirtió que la medida es "una pendiente resbaladiza" y que "nunca será correcto fabricar seres humanos para reparar a otros".


Proceso de la selección
Uno de los promotores del cambio de la norma es Mohamed Taranissi, director del Centro de Reproducción Ginecológica Asistida de Londres. El médico quiere ayudar al niño norirlandés de dos años Joshua Fletcher, que padece un mal mortal de la sangre.

El pequeño sufre anemia de Diamond-Blackfan, una enfermedad que podría tratarse usando células madre que estimularan a su cuerpo para producir glóbulos rojos sanos.

Pero ni los padres del niño, Joe y Julie, ni su hermano de cinco años, Adam, tienen las características para ser donantes de esas células. Por eso el doctor es partidario de obtenerlas de un "bebé de diseño".

La idea sería producir doce embriones con un tratamiento de reproducción asistida y elegir el que tenga los genes adecuados para implantarlo en el útero de la madre.

La selección se haría de la siguiente manera: cuando se constatara que no hay donantes vivos compatibles con el enfermo, los padres podrían elegir un embrión a través de la técnica llamada diagnosis genética de preimplantación y la aplicación de un tratamiento de fertilidad, con el objetivo de producir un embrión que esté sano y que además contenga el material genético adecuado para donarlo al niño enfermo.

Después ese embrión se implantaría en la madre y al producirse el nacimiento del bebé se usarían las células madre para curar al hermano. Para saber cuál es el embrión adecuado se debería extraer una célula unos tres días después de la fertilización para luego proceder al examen del tejido del embrión.

En Brasil se produjo una polémica similar, el 4 de marzo pasado, cuando el Congreso aprobó la ley de bioseguridad. Esa norma autoriza la investigación científica con células troncales embrionarias y libera la plantación y comercialización de transgénicos. En tanto, España también avanzó recientemente hacia una norma en procura de legislar sobre la selección de embriones para salvar a un niño enfermo.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados