Acción en el mundo de los fertilizantes

En una semana, Petrobras y Mosaic anunciaron inversiones por casi 200 millones de dólares

Patricia Martino / La Capital

El negocio de los fertilizantes está en plena expansión. Motivos no les faltan. Es que si la Argentina apuesta a alcanzar los 100 millones de toneladas de granos y pretende continuar siendo sustentable necesitará incrementar en los próximos años el consumo de nutrientes. La inauguración de la planta de fertilizantes líquidos SolMix de Pasa, de la brasileña Petrobras, que demandó una inversión de 15 millones de dólares en Campana, y la salida al mercado de Mosaic, de las estadounidenses Cargill y IMC Global, que está desembolsando 20 millones de dólares para formular superfosfato en Puerto General San Martín, comienza a concretarse la ola de inversiones en el sector que se había proyectado el año pasado.

En Argentina durante el 2004 se consumieron 2,6 millones de toneladas de fertilizantes entre nitrogenados, fosforados y mezclas pero según proyecciones de analistas esta suma podría duplicarse en la próxima década. La necesidad de reponer al menos parte de los nutrientes que se extraen con la intensificación de las prácticas agrícolas y el monocultivo, mantiene muy activa la demanda de estos insumos.

Mientras el sector agropecuario duplicó su cosecha en diez años y apuesta a incrementar la producción hasta 100 millones de toneladas, Argentina exhibe uno de los menores índices de fertilización por hectárea entre las grandes naciones productoras. La tasa de reposición de nutrientes extraídos del suelo no llega al 25% en promedio. Según algunos estudios sólo se repone el 25/30% del nitrógeno, 45/50% del fósforo, 1% del potasio y 7/10% del azufre.

Un trabajo de la Fundación Producir Conservando señala que el consumo de fertilizantes al menos debería duplicarse si se quiere tener algo de suelo cuando se alcancen las 100 millones de toneladas.

El estudio indica que el desarrollo genético y biotecnológico, la adopción masiva de fertilizantes y agroquímicos, la renovación del parque de maquinaria, sumado a prácticas culturales específicas, se tradujo en una mejora de los rendimientos medios que permitió alcanzar producciones récord.

La empresa Petrobras inauguró una planta de tiosulfato de amonio para la producción de fertilizantes líquidos azufrados destinados principalmente para la soja. El lanzamiento de SolMix producido en la Argentina es parte de un desembolso de 80 millones de dólares para los próximos tres años que la compañía destinará al agro para ampliar la producción de nitrógeno, incrementar la capacidad de logística y almacenamiento en el interior del país, instalar una fábrica de tiosulfato de potasio (producto que también es de muy abanzada hoy destinado a cultivos regionales pero en un futuro para cultivos de la región pampeana) y lo más importante la puesta en marcha de una planta de superfosfato simple, un fertilizante sólido fosfatado y azufrado también destinado al mercado de soja pero no sólo en Argentina sino también en el sur de Brasil.

El nuevo establecimiento ubicado en Campana demandó una inversión de u$s15 millones y cuenta con equipamiento de última generación, diseñado y construido en la Argentina. La planta tiene una capacidad de producción de 140 mil toneladas de fertilizantes por año, y producirá un ahorro de 18 millones de dólares al año para el mercado en sustitución de importaciones.

En la cadena productiva de fertilizantes, la compañía emplea directa e indirectamente a 3.200 personas. Pasa fue pionera en el desarrollo y producción de fertilizantes líquidos en la Argentina y actualmente es el único productor de América latina. Petrobras tiene el 40% del mercado regional con la producción de las plantas de Campana y Brasil pero en el país tiene un gran desafío por delante. Es que el 80% del mercado utiliza azufre sólido y el resto de los productores se volcaron al azufre líquido.

Gabriel Casasola, gerente comercial del área fertilizantes, aseguró que "esta inversión va a permitir generar un incremento del mercado", sobre todo porque "el azufre en la Argentina es el nutriente que va a tener mayor tasa de crecimiento en los próximos cinco años".

Respecto a las proyecciones del mercado, el directivo precisó que la tendencia es que se duplique el uso de este insumo. "Las expectativas son de llegar a las 5 millones de toneladas de fertilizantes para el 2011.Para que la amplicación de la producción de granos se concrete es imprescindible que se use más fertilizantes porque los suelos argentinos no están capacitados para seguir rindiendo en la medida que no tengan el agregado de insumos", detalló.

En la misma semana, las empresas Cargill y IMC Global presentaron para el mercado argentino a Mosaic, la mayor productora mundial de fertilizantes fosfatados. La nueva empresa es fruto de la fusión de ambas compañías en el área de nutrición de cultivos. El desembarco llegó de la mano de una inversión de 100 millones de dólares hasta 2010, dentro la cual se incluye la la planta de formulación de superfosfato simple que se está construyendo en Puerto San Martín y que estará finalizada a fin de año.

El presidente de Mosaic y director de la división nutrientes de Cargill Argentina, Eddy Fay, dijo que el mercado de fertilizantes está "en franco crecimiento y algunas estimaciones indican que el uso de los mismos se duplicará hacia el año 2010".

Otras empresas del sector de agronegocios están orientando también inversiones a ampliar su capacidad logística de recepción y distribución de estos productos. Bunge, por ejemplo, destinará un muelle de su nueva planta de Ramallo a la descarga de fertilizantes desde sus fábricas de Brasil, con la posibilidad de formular mezclas en Argentina. En tanto, el Ministerio de Economía investiga los contratos de exportación de urea de la empresa Profertil, la mayor productora del país, ante denuncias sobre una presunta posición dominante.