El empleo aumentó y bajó el subempleo en la región. Hay 126 mil personas con problemas laborales

La desocupación en Rosario bajó al 14,4% sobre el final de 2004

Aunque cayó 2,2 puntos, el aglomerado está segundo en el ranking de desempleo de todo el país

La tasa de desocupación en Rosario se ubicó en el 14,4% durante el último trimestre de 2004, 1,8 punto porcentual menos que en el trimestre y 2,2 menos que en el mismo período de 2003.

Sobre una población económicamente activa de 537 mil personas, 126 mil tienen problemas de empleo: 77 mil están desocupadas en la región y otras 49 mil están subocupadas.

Aunque los números de la comparación anual consolidan una tendencia positiva en materia laboral, el Gran Rosario sigue siendo uno de los aglomerados con mayor cantidad de desocupados. En la medición nacional, durante el último trimestre de 2004 se ubicó en segundo lugar, después del conurbano bonaerense que tiene un desempleo del 14,8%.

Otro dato significativo de esta medición es que la tasa de actividad -la gente que trabaja o quiere trabajar- se mantuvo en el mismo nivel comparada con el año pasado en el mismo período en Rosario y se acercó a la media histórica, con un porcentaje del 44,3%.

Este indicador se había disparado por encima del 46% en el tercer trimestre de 2004, influido por el ingreso de mayor cantidad de personas como oferentes en el mercado de trabajo debido al crecimiento que habían registrado algunos sectores de la economía de la región, como el agro o la construcción, que para muchos analistas fue considerado un boom.

Ese aumento de la actividad, en el tercer trimestre de 2004, había provocado un incremento del desempleo en la región respecto del período anterior, explicado fundamentalmente por la presión que ejerció el ingreso de más gente a la búsqueda de trabajo.


El panorama nacional
La realidad regional es un reflejo de lo que también ocurrió a nivel nacional, donde el desempleo bajó 2,3 puntos porcentuales y se ubicó en el 12,1 por ciento, contra los 14,5 del cuarto trimestre de 2003. En tanto, la caída respecto del tercer trimestre de 2004 fue de 1,1 punto.

Así se cumplieron los guarismos del gobierno anticipados en febrero pasado, en los cuales el presidente Néstor Kirchner daba cuenta de una caída de la desocupación por efecto de la reactivación económica, pero con números que aún están lejos de llegar a los años previos a 1994, cuando el desempleo llegaba a un dígito.

Por caso, actualmente en la Argentina, sobre 10,7 millones de personas que conforman la PEA en los 28 aglomerados que sondea el Indec, 1,3 millón están desocupadas.

Esta realidad es más dura si se considera desocupados a los beneficiarios de los planes Jefas y Jefes de Hogar. Con este cálculo, la EPH del Indec señala que la desocupación en todo el país alcanzaría el 16,2 por ciento (cuatro puntos más).

Por otra parte, en Rosario la subocupación, es decir las personas que trabajan menos de 35 horas semanales- también registró un retroceso en la región de 2,8 puntos porcentuales en un año (entre el cuarto trimestre de 2004 y similar de 2003). Y pasó de 12% a 9,2%. Es el único aglomerado que tiene una tasa de subempleo de un dígito.

Este indicador es uno de los que más retrocedió desde principios de 2003, cuando había tocado el 16,2%, para caer siete puntos a fines de 2004. Esto marca una tendencia positiva en materia de calidad de empleo en Rosario, sobre todo si se tiene en cuenta el retroceso de 2,1 puntos porcentuales entre los subocupados demandantes, es decir los que buscan aumentar el número de horas trabajadas. Esta cifra pasó del 8,5 por ciento en el cuarto trimestre de 2003 al 6,4% en el mismo período de 2004.

Paralelamente, la tasa de la subocupación no demandante (los que no buscan trabajar más de 35 horas) cayó de 3,5% a 2,8%.

Al mismo tiempo que cayeron la subocupación y la desocupación, también subió la tasa de empleo. Este indicador se elevó en el aglomerado Gran Rosario entre igual período de un año y otro, de 36,9% en el cuarto trimestre de 2003 a 38% en el mismo lapso de 2004.


Más para el interior
El Ministerio de Economía explicó que la reactivación agropecuaria, unida al desarrollo de obras viales y planes de vivienda fueron los impulsores del crecimiento del empleo.

Al mismo tiempo, señalaron que este despegue impactó más fuerte en las ciudades del interior del país, en especial en las más pequeñas, ya que las más grandes tienen consolidados sus desarrollos en infraestructura.

Por caso, el Indec destaca la situación de ciudades de menos de 500 mil habitantes, como el caso de Concordia, Entre Ríos, que pasó de tener un 18,8% de personas desocupadas en el segundo semestre del 2003 al 14,5% en igual período del año pasado.

Algo similar ocurrió en Paraná, en la misma provincia, donde la desocupación cayó de un 16,3 al 8,6% o en la ciudad de Santa Fe, donde el desempleo cayó 6,2 puntos porcentuales, de 17,1% a 10,9%.

Pero cuando se observan a las ciudades de más de 500 mil habitantes como el caso de La Plata o el conurbano bonaerense, las bajas son más atenuadas.

El relevamiento oficial precisa que de los aglomerados estudiados, 24 mejoraron su situación laboral y en cuatro de ellos ésta empeoró.

Por caso, la ciudad con mayor desempleo al cierre del segundo semestre de 2004 es Palpalá en Jujuy -15,9%-, mientras que en El Chorrillo en la provincia de San Luis sólo el 1,2% no tiene trabajo.

La situación en Palpalá sufrió un serio deterioro entre julio y diciembre del año pasado, ya que al cierre del primer trimestre el desempleo era de 10,2 por ciento.

Otras ciudades que empeoraron su situación fueron Ushuaia que pasó de 9,5 por ciento a 9,9 por ciento en la segunda mitad del año anterior, Bahía Blanca de 14,7% a 15% y La Rioja, de 8,8% a 9%.

Las colas de personas buscando empleo ya no son una postal tan frecuente en la ciudad.