Voces y anécdotas de la movida rosarina

Freddy y los Solares y Los de Barbacena son dos de los grupos más celebrados de la bailanta local

Se llama Víctor Andrés Cristaldo pero muy pocos lo conocen por este nombre. En el ambiente de la bailanta todos lo llaman Freddy y es el líder del grupo rosarino "Freddy y los Solares". Está casado, tiene cuatro hijos, 33 años y suma catorce dentro de la cumbia.

Freddy sabe muy bien que el negocio de la música tropical es bastante ingrato para los músicos y a veces despotrica por ciertas reglas de juego que imponen los empresarios. "Yo vivo de esto. Soy el dueño de la banda, que tiene ocho integrantes; antes se usaba que el músico tenía que tener su sonido y ese tipo de cosas, ahora yo soy el que alquilo todo -manifiesta-. Esta profesión tiene ingratitudes como cualquier otra pero uno la sigue haciendo por el amor que siente por ella. Acá desde siempre los más difíciles son los empresarios, pero con los grupos de Rosario; porque si viene uno al que no conoce nadie y estuvo dos veces en la televisión van y ponen el dinero, más allá que después resulten cualquier cosa".

Los ojos le brillan mientras habla y sus gestos son escasos pero contundentes. "La cuestión de estar en la televisión es muy simple -apunta-: hay que poner plata. Eso trae mucha disconformidad porque varios de los artistas de hoy son "artistas" porque ponen el dinero y no por las condiciones que puedan llegar a tener como músicos. Entonces gente que sí tiene las condiciones y que trabaja duro en esto queda relegada de ese circuito".

La banda de Freddy está por editar su disco número veinte gracias a un sello de la ciudad de Santa Fe. Freddy comenta que durante seis años estudió vocalización, que tuvo que rendir "cómo músico" y que es integrante de Sadaic. También da su parecer sobre la cumbia villera: "no tengo nada contra la gente que hace esa música, yo digo que el sol sale para todos y todos tienen el derecho de ganarse el peso. Pero a mí me parece que no hay un mensaje en sus letras y yo con mi música quiero dejar un mensaje. La gente que entiende tu mensaje te sigue, cada grupo tiene su público y yo considero que canto para una cierta cantidad de gente que le gusta la buena música tropical".

La banda reivindica un duro esfuerzo cotidiano. "Nosotros día a día tratamos de hacer mejor las cosas, musicalmente y estéticamente, porque aunque somos todos feítos nos vestimos bien -dice Freddy-. Somos un grupo que cuando sube al escenario lo hace de traje porque para nosotros como artistas es primordial cuidar tanto las letras como la imagen".


Una trayectoria
Felipe González cuenta que está en la música prácticamente desde que nació. Tiene 53 años y es el compositor y guitarrista del emblemático grupo rosarino "Los de Barbacena". La banda se formó en la década del 70 bajo el nombre de Grupo Z, que estaba compuesto por los cinco hermanos González.

"En esos años un productor nos dijo que nos hacía falta un nombre más tropical y entonces ahí nació la idea de Barbacena porque es una isla del caribe; entonces nos pusimos "Los de Barbacena". Con el paso del tiempo fuimos incorporando a otra gente además de nosotros y actualmente somos nueve integrantes", especifica González con una sonrisa dibujada en el rostro.

El grupo trabajó más de quince años viajando y haciendo shows en la zona del Gran Buenos Aires, un territorio al que González dice conocer como la palma de su mano. "Antes tocábamos e iba toda la familia a bailar en los bailes que se hacían en la Rural, eran grandes festivales donde se presentaban varios grupos pero eso ya se fue perdiendo", recuerda González, y ahora no puede evitar un gesto de tristeza.

Otra de los grupos que conforman el arco de los rosarinos dentro de la movida tropical es "Chanchi y los auténticos" que ya tiene editado su tercer CD, y otros tantos grabados de manera independiente.