| sábado, 04 de septiembre de 2004 | Kirchner resaltó que el salario se incrementó un 125% en el último año Empresarios avalan suba del mínimo pero esperan medidas para pagarlo Un grupo de entidades que participó en la negociación le pide al gobierno disposiciones "efectivas e inmediatas" Ahora todos quedaron conformes, aunque la continuidad de la calma por la suba del salario mínimo dependerá de algunos anuncios a efectuar por el gobierno nacional. Los empresarios finalmente ayer aprobaron elevar el salario mínimo a 450 pesos, pero puntualizaron que esperan del gobierno la aprobación de medidas "efectivas e inmediatas" que hagan posible pagar los nuevos importes. Mientras tanto, el presidente Néstor Kirchner resaltó que el salario mínimo ya acumula una suba del 125 por ciento en el último año, de 200 a 450 pesos, y destacó que en el mismo lapso hubo una inflación inferior a los dos dígitos, lo cual recompuso fuertemente los ingresos de los trabajadores.
Los hombres de negocios se congratularon por haber evitado que el gobierno tuviera que decidir el incremento en las remuneraciones mínimas y negaron haber sufrido presiones para aceptar esa suba, aunque adelantaron su negativa a que el nuevo piso salarial afecte directamente los sueldos básicos de convenio.
En una declaración que firmaron la Unión Industrial Argentina (UIA), las cámaras de Comercio y de la Construcción, la Sociedad Rural, la Unión de Empresas de Servicios, los representantes de la banca privada, Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Bolsa de Comercio quedó plasmada la decisión de las entidades empresarias de avalar el aumento de 100 pesos.
En el acta los empresarios dicen que se avienen a aprobar 450 pesos de salario mínimo "en el entendimiento de interpretar que el esfuerzo requerido por el Poder Ejecutivo Nacional ha de conllevar medidas efectivas e inmediatas".
La patronal señala que tales medidas deberán permitir "hacer frente a este nuevo piso de ingresos del sector dependiente" especialmente en el caso de las pymes de las empresas del interior del país.
El acta dice además que "los problemas que aquejan al mundo de la producción requieren de instrumentos idóneos no sólo en el campo laboral sino también en el fiscal, financiero y legal".
"En tal sentido, entendemos que las cuestiones que hacen a la inversión y al crecimiento con empleo, así como al estímulo para la formalización de empresas y trabajadores, deben ser materia de análisis y debate en las comisiones de Empleo y de Productividad", agrega la nota.
"Esfuerzo mayor que el razonable" "Hemos hecho un esfuerzo mayor que el que pensábamos razonable. Ahora esperamos discutir medidas que hagan esto viable", indicó el laboralista Daniel Funes De Rioja, que representó a la UIA en el Consejo del Salario.
El vocero patronal sostuvo que "nadie puede ignorar que para una pyme del interior afrontar obligaciones como éstas es complejo", aunque descartó que haya empresas en riesgo de quebrar a raíz del aumento, tal como habían advertido algunos negociadores patronales durante las tratativas que culminaron anteayer.
Los empresarios se apuraron en aclarar que "los salarios básicos (de convenio) no necesariamente deberían subir", porque "lo que no puede ser inferior al mínimo es el ingreso efectivo de cada trabajador".
No obstante, aunque la suba de los básicos de convenio no sería automática en los casos en que haya alguno por debajo de 450 pesos, ambos deberían confluir en cada una de las nuevas negociaciones que se sucedan, según aseguraron a especialistas en regulación laboral.
El presidente de la Cámara de Comercio (CAC), Carlos De la Vega, consideró por su parte como "un hecho muy positivo" que se haya alcanzado un acuerdo y negó que su implementación pueda verse entorpecida en el interior, al sostener que "la enorme mayoría del comercio no va tener ningún problema".
De la Vega no reclamó desgravaciones impositivas o asistencia crediticia como varios otros de sus colegas, pero sí "una rebaja impositiva al consumo que impulse las ventas en el mercado interno".
"Durante años hemos dicho que los salarios no deben ser establecidos por el Ejecutivo, y una vez que se nos presenta el desafío de una negociación con el sector sindical, de ninguna manera podíamos admitir la posición de algunos facilistas que querían salvar su responsabilidad y dejar que decida el Estado", añadió.
El dardo apuntaba a los representantes patronales que se abstuvieron ayer de avalar la suba de 100 pesos por considerarla "insuficiente", como Carlos Heller (Central de Entidades Empresarias Nacionales) y Eduardo Buzzi (Federación Agraria Argentina).
"Nosotros creemos que el salario mínimo debe ser más elevado de lo que se fijó, pero también entendemos que no todos los sectores de la economía están en condiciones de hacerse cargo. No es lo mismo la situación de una pyme en el interior que de una empresa exportadora", había argumentado el gerente del Credicoop.
Funes De Rioja también chicaneó a Heller y a Buzzi por su abstención en el Consejo, al señalar que "hubo entidades que se pronunciaron diciendo que los sueldos eran bajos, pero que por el otro lado han pedido que se los pague el Estado".
Recomponer el poder adquisitivo En tanto, en un acto que encabezó en la ciudad cordobesa de San Francisco, Kirchner afirmó que su administración trabaja "para recomponer el poder adquisitivo de la gente", a sólo 24 horas que culminaran con acuerdo entre empresarios y sindicatos, si el laudo oficial, las tratativas del Consejo del Salario.
"En un año el salario mínimo pasó de 200 pesos a 450, lo que significa un aumento de un 125 por ciento, con un 3,7 por ciento de inflación", destacó el mandatario.
En la misma línea, Kirchner afirmó que también se "está luchando contra la indiferencia, la pobreza y el desempleo", lo que permite la baja de esos índices, y reiteró que en más de un año de gestión se aumento un 60 por ciento los haberes de los jubilados.
La CGT, conforme También el día después del incremento salarial y mientras los empresarios salieron a reclamar un apoyo oficial para afrontar la suba acordada en el Consejo del Salario, la Confederación General del Trabajo (CGT) reivindicó el resultado de las negociaciones, y sostuvo que el ingreso mínimo efectivo será de 500 pesos, si se cuentan los 50 pesos no remunerativos que se agregan a los sueldos básicos.
En tanto, el titular de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y secretario de Prensa de la CGT, Juan Manuel Palacios, afirmó que la central obrera logró un piso mínimo salarial de 500 pesos para la mayoría de los trabajadores comprendidos en convenios colectivos, ya que al mínimo de 450 pesos hay que sumarle los 50 pesos del adicional no remunerativo.
Palacios adelantó que el consejo directivo cegetista reclamó al gobierno la necesidad de incrementar las asignaciones familiares "sin discriminación de ninguna índole ni topes".
"También continuarán las gestiones para que no se aplique el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a los insumos de la canasta familiar", señaló Palacios, quien exigió un aumento general integrado a los básicos que abarque a los trabajadores privados y públicos nacionales, provinciales y municipales. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Los gobernadores de la Región Centro pasaron su lista de reclamos al presidente. | | |