| sábado, 04 de septiembre de 2004 | Maíz: cómo frenar a las micotoxinas Miriam Incremona y Mirian Gonzalez (*) Los patógenos fúngicos que causan enfermedades en la espiga y los granos de maíz, provocan disminución en los rendimientos y en la calidad de cosecha. Muchos de ellos producen numerosos compuestos tóxicos llamados micotoxinas, que al ser consumidas por humanos y animales causan enfermedades conocidas como micotoxicosis.
Estas micotoxinas afectan a los animales monogástricos, entre estos se encuentran los cerdos en los cuales producen una menor eficiencia de amamantamiento, camadas pequeñas, rechazo al alimento, vómitos y disminuciones en el peso.
Las especies de hongos pertenecientes a los géneros Aspergillus, Fusarium y Penicillum son importantes productores de aflatoxinas, fumonisinas y tricotecenos. Aspergillus flavus son productores de aflatoxinas. Muchos de estos hongos se presentan a campo y / o en almacenamiento. No se ha establecido la relación entre el nivel de infección y la concentración de micotoxinas.
Con el objetivo de aportar mayor información sobre la incidencia de estos patógenos, en híbridos comerciales del sur de Santa Fe, se llevaron a cabo ensayos en las localidades de Zavalla y Oliveros tomándose semillas entre 9 y 12 híbridos comerciales, probándose interacción entre localidades, incidencia de los principales patógenos y poder germinativo.
En Zavalla se manifestaron diferencias significativas entre híbridos para la infección por Fusarium sp (40%), Penicillum sp (87%). En Oliveros los valores fueron de Fusarium sp (39,5%) y Penicillum (84%), con respecto a la germinación esta fue mayor en la localidad de Zavalla (100%) que en Oliveros (97%) siendo estos dos patógenos preponderantes en estas zonas, si bien las condiciones ambientales juegan un papel preponderante en la infección y colonización de espigas por estos hongos.
Es importante por eso tener en cuenta al momento de almacenamiento las condiciones en las cuales se realiza este, siendo lo optimo un ambiente seco y bajas temperaturas, frenando la actividad biológica de estos patógenos y su colonización en el hospedante, de esta manera se intentaría frenar la producción de micotoxinas.
Aún se sigue estudiando e investigando la incidencia de estos patógenos en espigas de maíz y su deterioro en rendimiento, producción y consumo para poder llegar a una calidad comercial optima para la alimentación humana y animal más segura.
(*) Docentes de la Facultad de Ciencias Agrarias UNR enviar nota por e-mail | | |