Se complica la causa para diez obreros de EPE

Los diez empleados de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) detenidos desde la semana pasada, acusados de robar cables de bronce y aluminio de la compañía para la cual trabajaban, vieron complicada ayer su situación procesal por lo que continuarán apresados.

Es que la jueza Correccional Graciela Sedda entendió que las pruebas recolectadas hasta el momento obligaban al cambio de carátula del expediente, que ahora se refiere a "fraude contra la administración pública" y corresponde que sea investigado por la justicia de Instrucción. Así las cosas, desde ayer quien quedó a cargo de la pesquisa es el juez Carlos Alberto Triglia.

Los empleados de la EPE, entre ellos capataces y jefes de cuadrillas con más de 20 años de antigüedad en la empresa, fueron detenidos la semana anterior después de que en una chatarrería de la zona suroeste se hallaran 165 kilos de cables de aluminio forrado e identificado como de la empresa. El encargado del comercio dijo que esos materiales eran provistos por los empleados estatales que llegaban hasta el local dos o tres veces por semana y a los que les pagaba unos 400 pesos por carga.