| miércoles, 07 de abril de 2004 | Dudas sobre el impacto del boom sojero en la economía venadense Dicen que los rindes no son los esperados y la cautela desplaza al consumismo Carlos Walter Barbarich / La Capital Venado Tuerto. - La cosecha en el sur santafesino comenzó de manera arrolladora y, a pesar de que los rindes no son los esperados y en varias zonas fueron muy malos, el precio de la soja se mantiene arriba. El boom de la soja disparó la demanda de inmuebles, vehículos, repuestos y también especulaciones: muchos creen que para mediados de mayo no habrá propiedades inmobiliarias en el mercado venadense, aunque también están quienes piensan que la falta de rendimiento en la oleaginosa podría abortar muchas de las operaciones comerciales que se dan por hechas.
Lo cierto es que la cosecha de soja de primera está en plena recolección y hasta ahora se ven pocos lotes que superan los 35 quintales por hectárea. Incluso hay lugares como Melincué donde apenas llegó a los dos dígitos. En este marco no hay grandes expectativas para la soja de segunda que fue la que más sufrió la sequía en la región. "Faltaron por lo menos unos 200 milímetros de agua", confió un productor agropecuario venadense.
Un productor agropecuario de Chovet, Darío Smajic, explicó el fenómeno de la baja en los rindes de la soja: "El fuerte calor de los últimos días precipitó y secó la soja que no alcanzó a formar del todo el grano y eso se nota en el peso". Es que la falta de agua y las altas temperaturas hicieron estragos en vastas zonas del sur santafesino.
El maíz, por su parte, ofrece un panorama muy distinto al de la soja. En rigor, no se sembró como el año pasado y los rindes son muy buenos y orillan un promedio de entre 85 y 95 quintales, aunque no faltan los que están por debajo de los 60.
La bonanza del campo, aún con bajos rindes, se nota en el mercado inmobiliario y automotor que había tenido una fuerte demanda en las primeras semanas del año y que hoy parece mermar. "Pareciera que los colonos están haciendo cuentas en lugar de salir a comprar alocadamente como parecía", graficó un vendedor de autos.
Sin embargo, en el rubro inmobiliario la cosa es favorable. No hay suficientes casas para alquilar y los precios se dispararon en un 10% y hasta en un 30% para los inquilinos. El valor de la propiedad aumentó considerablemente también. Ejemplo: una casa que estaba en 50.000 pesos un año atrás hoy se puede llegar a vender al doble.
"Un terreno que hace unos meses estaba en alrededor de 20.000 pesos hoy no lo conseguís por menos de treinta", explicó un operador inmobiliario y resaltó: "Siempre y cuando tengas suerte, y puedas encontrar uno que se venda".
En el rubro automotor pasa algo similar y la demanda de vehículos es tal que algunas concesionarios no están entregando unidades hasta dentro de unos 60 días. enviar nota por e-mail | | |