| miércoles, 07 de abril de 2004 | Sigue en coma el chico atacado en Echesortu Lo golpearon con una baldosa en una pelea. Ayer la policía le tomó testimonio a un par de amigos Mauro Sebastián Reol, el pibe de 19 años que fue golpeado en la cabeza por una baldosa arrojada por otro muchacho a la salida de un minimarket de Echesortu, seguía anoche internado en la sala de terapia intensiva del Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, en estado de coma y conectado a un respirador artificial. En tanto, los investigadores de la salvaje agresión, tomaron declaración ayer a un par de amigos del joven herido en pos de aclarar cómo sucedieron los hechos. En ese orden, el juez que lleva adelante la pesquisa mantuvo clausurado ayer el maxiquiosco ante la sospecha de que la pelea se haya originado en su interior y no afuera del local, como hasta ahora sostienen los amigos que acompañaban a Mauro.
La medianoche del sábado, Mauro y un grupo de compañeros se habían reunido en el minimarket de San Juan 3510. Desde allí se iban a ir a bailar a un boliche de La Florida. Según lo declarado en la seccional 6ª por los amigos del joven agredido, cuando salieron del local uno de ellos pateó una botella de plástico que impactó en un integrante de un grupo "de desconocidos". Lo que pareció un hecho sin consecuencias derivó en algo mucho peor.
Mauro y sus amigos caminaron por calle San Nicolás hacia el norte y en esas circunstancias fueron apedreados por el otro grupo. Una pedazo de baldosa impactó en la nuca del pibe y lo dejó tendido en el piso, inconsciente. Una ambulancia lo llevaría más tarde al Heca, donde permanecía internado anoche.
"Hay muchas cosas que no cierran, que parecen esconder algo", comentó ayer un allegado a la investigación. "Las declaraciones de los chicos que llegaron a la comisaría, en compañía de un abogado, son coincidentes en muchos aspectos. Pero parecen armadas para la ocasión", agregó.
Contradicciones Extraoficialmente se supo que los dos pibes que declararon mantuvieron la primera versión de los hechos aunque con "algunas contradicciones más allá de lo aceitado de su discurso", comentó la fuente que, con varios años de trabajo en la policía, cree que "agresores y agredidos se conocen, son todos del mismo barrio y están ocultando algo por temor a represalias".
Asimismo, los declarantes mantuvieron su dicho de que el hecho ocurrió afuera del minimarket. Sin embargo, el juez Jorge Eldo Juárez mantuvo clausurado y con custodia policial el local de calle San Juan y no se descarta que hoy vaya a hacer una inspección ocular que le permita echar un poco de luz sobre el asunto.
Anoche, tanto la hermana de Mauro como la madre de uno de los amigos que acompañaban al pibe al momento de la agresión, sostuvieron ante La Capital que "en este momento no nos interesa otra cosa que rezar para que Mauro se recupere, para que salga de esto" y prefirieron no volver a hablar sobre los hechos del sábado.
Mauro tiene tres hermanos. Hace sólo un mes que inició sus estudios de Licenciatura en Química después de cursar la primaria en la escuela Pestalozzi, ubicada a la vuelta de su casa de San Juan al 4000, y la secundaria en la Escuela de Educación Técnica 469 de España 150, de la cual egresó el año pasado. enviar nota por e-mail | | |