Se espera en las próximas horas la aprobación del pedido de intervención

Multitudinario respaldo a la gestión juarista en Santiago

Reivindicaron la autonomía del gobierno provincial y tildaron de "traidor" al presidente Kirchner

Encabezadas por militantes de la rama femenina del justicialismo santiagueño, más de diez mil personas se agolparon anoche detrás de los vallados que protegen la Casa de Gobierno de esta provincia en apoyo a la gestión juarista y contra la inminente intervención federal. "Jamás imaginé ver tanta gente en la concentración más grande de la historia política de Santiago del Estero", dijo Carlos Juárez. "Hay más de 30 mil personas", agregó su esposa, Nina Aragonés.

Corazones de papel con el nombre de Nina, como llaman a la gobernadora Mercedes Aragonés, y de su esposo, Carlos Juárez, se mezclaban con pancartas que decían "Kirchner traidor" y otras en rechazo a la intervención, a la que definían como "una enfermedad" y a los Juárez como "el remedio" para Santiago.

La movilización fue el corolario de una jornada cargada de tensión en la capital santiagueña, donde funcionarios de gobierno repudiaron a través de los medios la intervención y varios dirigentes de la oposición se marcharon de la provincia tras admitir su temor ante posibles desbordes de la militancia juarista.

Desde la mañana gran cantidad de personas recibió bolsas con alimentos, que el gobierno distribuyó en coincidencia con el lanzamiento de la movilización.

En tanto, varias personas que iniciaron causas judiciales contra el matrimonio Juárez decidieron en las últimas horas abandonar Santiago del Estero o reclamaron custodia a la Policía Federal por temor a ser atacados por partidarios del gobierno, como le ocurrió en 2002 al diputado nacional José Figueroa, días antes de un acto de campaña menemista, cuya casa fue destruida.

Uno de los que partió con destino desconocido fue el gerente de la delegación local de la Ansés, Juan Manuel Baracat, quien denunció a la gobernadora, funcionarios, diputados y jueces por el presunto cobro indebido de jubilaciones.

Asimismo, el abogado tucumano César Barrojo, quien afirmó haber sido amenazado tras presentar denuncias contra los Juárez, solicitó custodia a la Policía Federal. Por su parte, directivos del canal de televisión prepaga Cable Express denunciaron ante la Justicia una serie de amenazas de parte de desconocidos, en las que se les advertía que instalaciones de la empresa podrían ser objeto de ataques.

"Es la concentración más grande de la historia santiagueña", dijo Carlos Juárez.