Pedirán mañana la extradición de Videla, Massera y Suárez Mason

Alemania viene por tres represores

Es por el asesinato y desaparición de ciudadanos germanos en la Argentina durante la última dictadura

Alemania pedirá esta semana al gobierno argentino la extradición de los represores Jorge Rafael Videla, Emilio Massera y Guillermo Suárez Mason para que puedan ser procesados ante los tribunales germanos por violación a los derechos humanos.

En rigor, Alemania será el primer país europeo que solicitará la extradición de Videla, así como la del ex almirante Massera y del ex general Suárez Mason. Un pedido similar del juez español Baltasar Garzón había sido rechazado el año pasado por el gobierno ibérico, que finalmente no lo envió a su par argentino.

La documentación, que ya se encuentra en poder de la embajada alemana en Buenos Aires, será entregada mañana a la Cancillería argentina, según se encargó de adelantar el portavoz del Ministerio del Exterior germano, Walter Lindner, desde Berlín.

"Se trata de esclarecer un capítulo realmente oscuro en la historia argentina que atañe a nuestro país", subrayó el vocero. De este modo, el gobierno en Berlín apoyó la de extradición reclamada por la Justicia alemana en diciembre pasado.


Un paso consecuente
En ese sentido, Lindner agregó: "Es un paso consecuente en la política de este gobierno en materia de derechos humanos, que apoya todas las medidas que lleven al esclarecimiento del destino de los desaparecidos alemanes durante la dictadura militar argentina".

La Audiencia Regional de Nuremberg-Fuerth había solicitado la presentación de Videla, Massera y Suárez Mason, tras conocerse que la Fiscalía los acusa de ser responsables del asesinato y desaparición de ciudadanos alemanes en la Argentina durante los años de plomo.

Se trata del secuestro y posterior asesinato de los ciudadanos Klaus Zieschank y Elisabeth Kaesemann, dos de las más de cien víctimas alemanas de la última dictadura.

En enero pasado, la Justicia argentina había ordenado la detención de los tres ex militares involucrados (que tienen prisión preventiva), pero se negaron a declarar en la causa.

Incluso Videla y Suárez Mason rechazaron ser juzgados en Alemania, mientras que Massera no pudo ser interrogado ya que se encuentra internado (en grave estado) en el Hospital Naval Pedro Mayo.

En esa audiencia, ordenada por el magistrado federal Norberto Oyarbide (quien actuó subrogando a su par Sergio Torres), Videla expresó que el hecho es "cosa juzgada". Y se expidió sobre la "falta de jurisdicción" de los tribunales alemanes para posar la lupa sobre episodios ocurridos en la Argentina.

Tras completar ese paso procesal, Oyarbide ordenó un oficio a fin de que, vía Cancillería, se requiera a Alemania que envíe la documentación necesaria para proseguir con el trámite de extradición.

A partir de esa fecha, el gobierno germano tenía un plazo de 40 días para pedir oficialmente la extradición, que se cumple el sábado próximo. Los tres represores, además, cumplen prisiones preventivas dictadas en otras causas sobre apropiación y ocultamiento de menores y violaciones a los derechos humanos.


Días de furia
Zieschank fue secuestrado el 26 de marzo de 1976 en la localidad bonaerense de San Martín, desde donde fue trasladado a varios centros clandestinos de detención. Luego fue considerado un desaparecido hasta que, años después, se encontró su cadáver a orillas del Río de la Plata.

En tanto, Kaesemann fue secuestrada el 24 de mayo de 1977 y, posteriormente, asesinada. Su cuerpo fue encontrado, junto a otros 15 ejecutados, en un predio en la zona de Monte Grande, en el conurbano bonaerense.

Para el abogado Wolfgang Kaleck, integrante de la Coalición contra la Impunidad (un frente de organizaciones alemanas defensoras de los derechos humanos), el pedido de extradición del gobierno germano a la Cancillería de Buenos Aires "no es un paso de la arrogancia sino una muestra de apoyo a todos aquellos que en la Argentina buscan el esclarecimiento del pasado".