Turismo Carretera: pasión de multitudes

La categoría pasó por Comodoro Rivadavia y superó todas las expectativas

El gran circo del Turismo Carretera (TC) finalmente pasó por Comodoro Rivadavia, y tanto pilotos como directivos de esa categoría comprobaron el acierto de traer una competencia al remodelado autódromo local General San Martín, donde unas 45 mil personas le dieron marco a la 2ª fecha de la categoría y del TC Pista, donde se impusieron Omar Gurí Martínez y Sebastián Diruscio respectivamente.

El TC convoca a multitudes en cualquier ciudad del país, pero la masiva asistencia de público del pasado fin de semana al remodelado circuito comodorense de 4.170 metros sorprendió tanto a veteranos pilotos como a dirigentes de la categoría.


Luego de 27 años
El regreso del TC, con su colorido circo de máquinas y pilotos (tras 27 años de ausencia) hizo resurgir esa enorme pasión fierrera que anida en los corazones tuercas de la Patagonia.

Todas las previsiones y expectativas creadas en torno a la presencia del TC en Comodoro Rivadavia fueron superadas. Más de 45 mil almas acudieron al autódromo local el domingo y 25 mil personas promedio los días previos a la competencia final.

"Esa cantidad de público es la misma que asiste a las carreras del TC en el autódromo de Buenos Aires. Esto muestra que no se equivocó la ACTC cuando decidió traer el TC a Comodoro Rivadavia", remarcó un conocido ex piloto local del TC Patagónico.

El enorme fervor popular que despertó el TC hizo que el propio titular de la ACTC, Oscar Aventín, anticipara: "Comodoro Rivadavia tendrá una fecha fija anual del calendario de la categoría".

"El Auto Moto Club presentó un autódromo moderno, rápido, prolijo, con una pista suficiente para el espectáculo del TC, así que realmente estamos muy satisfechos", puntualizó el dirigente. Es más, algunos dirigentes de otras categorías nacionales, como la del Top Race, ya están interesadas en traer también sus autos ante la convocatoria que tiene aquí el automovilismo.


Beneficios económicos
La gran afluencia de gente colmó la capacidad hotelera y el comercio y las empresas de servicios de la ciudad trabajaron a pleno. Un aluvión de visitantes de distintos lugares de la Patagonia, y hasta del vecino Chile, poblaron sus calles.

Para comprar un helado, cenar en un restaurante o hablar desde un teléfono público había que hacer cola. "Millones de pesos generó la presencia del TC y ese dinero quedó en Comodoro", decía exultante un dirigente del Auto Moto Club de esta ciudad.

Según fuentes de la Cámara de Comercio local, el TC originó además incalculables beneficios económicos a Comodoro Rivadavia, que, incluso, repercutió hasta en el campo laboral.

Desde una semana antes de la llegada de la categoría, llamó la atención los pedidos de ocupación temporaria que se podía leer en algunos avisos clasificados y hasta en carteles colocados en la vía pública sobre la ruta nacional 3, en cercanías del autódromo.

"Se necesitan parrilleros, cocineros", "promotoras", "personas para atención al público", rezaban los avisos. Es que el TC, con su marketing y televisión a cuestas, reportó beneficios económicos a varios sectores de la población, directa o indirecta.

Las máximas autoridades de la provincia no pudieron estar ajenos a la convocatoria del TC y no escatimaron conceptos para ponderar el trabajo del Auto Moto Club comodorense.

"El trabajo y esfuerzo de sus dirigentes para traer el TC a Comodoro fue excepcional", dijo el gobernador Mario Das Neves y agregó: "No es fácil recibir a miles de personas durante un fin de semana. Sin embargo, la ciudad, el comercio y empresas de servicios, respondieron".

Sólo un detalle empañó la fiesta del TC y fue la presencia de inspectores de la DGI en el autódromo, cuando estaba atestado de gente. Los "sabuesos" inspeccionaron los boxes del piloto local, Ariel Pacho, la carpa del chasista de autos del TC, Alberto Canapino, y el quincho del autódromo, entre otros lugares.

Algunos dirigentes ligados al automovilismo local creyeron ver una presunta "mano negra" desde Trelew (donde también corre el TC) que "celosos por el éxito de la convocatoria conspiraron para quitarle trascendencia a la carrera de Comodoro", señalaron. Pero más allá de las presuntas conspiraciones y los estériles enfrentamientos regionales que algunos alientan, el TC desembarcó para siempre en Comodoro Rivadavia y la Patagonia austral vivió una verdadera fiesta tuerca. (Télam)

Los organizadores quedaron más que satisfechos con una prueba que dejó grandes beneficios económicos.