"Los pensionados" no acertó con el elenco ni la trama

Las razones del fracaso de una idea "original" de Adrián Suar

La telenovela de Pol-Ka, con Damián de Santo y Cecilia Dopazo, apenas supera los 12 puntos de rating

Pedro Squillaci / La Capital

"Los pensionados" le valió con un sólo capítulo la derrota más grande que tuvo la escudería Pol-Ka en diez años de vida. Todo comenzó con ese fatídico debut del lunes 2 de febrero, cuando "Los Roldán", por Telefé, le sacó 16 puntos de ventaja. A un mes de aquel día, pasó de todo. Se llegó a decir que levantaban la tira, que echaban a Adrián Suar de Canal 13 y que Patricia Palmer y Pablo Alarcón se iban del elenco. Pero nada de eso ocurrió. Lo cierto es que la telenovela no levanta puntería y que le sobran motivos para ser un fracaso.

El primer error de Suar fue poner a las 21 una novela cuyo eje principal pasa por romances de veinteañeros. Desde "Gasoleros" para acá la virtud del Chueco había sido reunir en una misma tira cruces amorosos de distintas generaciones. Eso atrapaba a la familia entera frente a la TV. Pero ahora apostó a encuentros y desencuentros de Tony (Damián de Santo) y Vera (Cecilia Dopazo), el triángulo de Flopy (Marcela Kloosterboer) con los amigos Ale (Guido Kaczka) y Diego (Alejo Ortiz), y la tibia relación entre Cata (Palmer) y su ex compañero del colegio Carlos (Alarcón).

El segundo error fue no convocar a una figura fuerte, cuya sola presencia le de 15 puntos de rating sea cual fuese la tira. De Santo es buen actor pero no da para ponerse al hombro la novela, y Cecilia Dopazo tampoco tiene un ascendente interesante sobre los espectadores. Encima, el dueto que componen Tito y Uriarte/Ugarte (Miguel Angel Rodríguez y Gabriel Goity) en el canal de la competencia es insuperable.

La tercera pifiada de Suar fue arriesgar con Luciano Pereyra y Laura Oliva, e insistir con Patricia Palmer, que venía de un fracaso con "Ilusiones". No es grave, pero también resta. Pol-Ka supo jugarse en otras oportunidades pero con consagrados, como Juan Carlos Calabró en "Campeones" o Dady Brieva en "El sodero de mi vida". Pero Laura Oliva es menos disparatada que en "Grandiosas", por lo tanto no surte efecto, y Pereyra para rendir como el envío necesita tendría que estudiar actuación. Nada menos. Comparando debutantes, Sofía Castiglione (la hija de Moria Casán) hace mejor papel en "Los Roldán", lo que es mucho decir.

La falta de dinámica en el formato es otro tema clave. Cada escena de "Los pensionados" se hace larga, se estiran innecesariamente los diálogos y pierden agilidad. Las comparaciones son odiosas, pero en este caso son inevitables. "Los Roldán" tiene secuencias que no superan los 40 segundos, lo que hace que no decaiga la trama y el guión hace que todas las escenas parezcan importantes.

"Los pensionados" falla desde el nombre, ya que en realidad debería llamarse "Los pensionistas", y para una producción televisiva no hay nada peor que quedarse a mitad de camino. Estos pensionistas no tienen resto para un público progre, capitalino y veinteañero, y tampoco tiene los códigos necesarios para una tira "popular". A Pol-Ka lo mejor que le puede pasar es asumir la derrota, y pensar una nueva estrategia para la próxima batalla.

El elenco tiene caras conocidas pero no una figura de peso.