Hasta Racing empujó un poco más al casi condenado Chicago

Lo goleó 4 a 0 con una muy buena producción en el complemento

Con un segundo tiempo altamente efectivo, Racing Club hundió aún más a Nueva Chicago en la tabla de los promedios del descenso, al derrotarlo por 4 a 0 en Mataderos.

Los goles del equipo de Avellaneda fueron señalados por Diego Milito -en dos ocasiones-, Mariano González y Lisandro López.

Racing cambió en el complemento gracias al ingreso de Vicente Principiano, que le aportó un mayor caudal futbolístico, y su socio Lisandro López.

El primer tiempo fue insoportable. Se dio el típico enfrentamiento entre un equipo que no pudo y otro que no quiso.

Después de cuatro derrotas consecutivas (Central, Vélez, Boca y Chacarita), Chicago se plantó para no perder. Con demasiadas precauciones, atornillado a su campo de juego.

Sin variantes, sin sorpresas y sin cambios de ritmo, Racing fue inofensivo cuando se internó en campo rival. Abusó de los pases laterales y fue poco profundo en cada uno de sus avances.

De ese modo, el primer remate franco al arco partió de los pies de Norberto Fernández, a los 38 minutos, y a las manos de Cuenca. Para colmo, en las esporádicas ocasiones en las que un jugador de Racing prosperó, fue cortado con faltas. Un fiasco.

Chicago salió a buscar el partido en el complemento, se adelantó unos metros y Racing supo aprovechar a la perfección los espacios libres, especialmente por el lateral que cubría César González, el talón de aquiles de la defensa local.

El primer gol fue una habilitación de Principiano a Milito, ante una defensa estática, y el remate, previo rebote de Nacho González, terminó en la red. El segundo, el que definió todo, llegó a los 15. Otra perfecta habilitación de Principiano que encontró a Mariano González libre de marca y definió sin problemas para el 2 a 0.

De allí en más Chicago se desesperó, dentro y fuera de la cancha, porque sus jugadores no encontraron los caminos y la hinchada arreció con sus insultos.

A los 30, Lisandro López, con un enganche espectacular y una exquisita definición al primer palo -dos minutos antes había dado un disparo suyo en el palo- colocó el tercero y cerró la cuenta Milito, de cabeza.

Racing se fue festejando la segunda goleada consecutiva y el árbitro Rafael Furchi no dio el adicional, se apiadó de un Chicago que apenas tiró tres veces al arco y que no marca un gol desde la séptima fecha...

Diego Milito festeja uno de sus goles.