| miércoles, 29 de octubre de 2003 | Detuvieron a una perra por orden de la Justicia de faltas Insólito. Efectivos de la Unidad Regional II, en un procedimiento poco usual, detuvieron ayer a Anka, una perra rottwailer de 7 años. El animal fue arrestado en la sede de la Jefatura de Policía y luego fue trasladado al Instituto Municipal de Salud Animal (Imusa) donde continúa enjaulado. "Esto es increíble", comentó Myrtha Eyherabide, propietaria de la mascota. La denunciante es una agente policial que vive en el mismo edificio que habita Eyherabide y su perra.
El 1º de septiembre pasado, Eyherabide recibió una citación de la comisaría 2ª. Luego de presentarse en la seccional supo que su vecina Gloria María Verone, que habita en un departamento cinco pisos más abajo que el suyo, había radicado una denuncia. Verone aseguró ante la policía que el animal intentó atacarla cuando ella estaba dentro del ascensor. No obstante, la perra no mordió a la denunciante.
Eyherabide recibió otra citación el 20 de este mes. Ayer se presentó en la Jefatura de Policía. Esta vez, Anka iba con ella en el auto. "Vinieron tres policías, le pusieron un bozal, correas de ahorque, la ataron con sogas y la secuestraron", protestó indignada Eyherabide.
La mujer de 66 años agregó que ayer ella fue entrevistada por un médico policial y aseguró que le tomaron las impresiones digitales "como a cualquier delincuente".
La mujer crió al animal desde que nació -hace 7 años- en un departamento ubicado en Zeballos al 2000. "Nunca tuve quejas", dijo Eyherabide. La jueza de faltas Nº2 Liliana Puccio investiga el caso y ordenó la detención de Anka. Así lo confirmó a La Capital el director del Imusa, Adrián Santo. Por su parte, este diario intentó dialogar con Gloria María Verone. "Soy una oficial principal de la policía. Si quiere saber algo de este tema, deberá dirigirse al juzgado de faltas Nº2 o a la división judiciales de la Unidad Regional II. No puedo hablar", afirmó.
Por su parte, la jueza Puccio ayer no se pudo referir tampoco al caso cuando fue consultada por este diario. "Ahora estoy dando clases en la Escuela de Policía. Si quiere saber algo, llame mañana (por hoy) al juzgado", apuntó la jueza Puccio. Por ahora, Anka sigue enjaulada. enviar nota por e-mail | | |