Washington/Bagdad. - Expertos militares estadounidenses afirman que encontraron los primeros indicios importantes sobre la existencia de programas de armas de destrucción masiva en Irak, pero los expertos de la ONU, que realizaron las inspecciones antes de la guerra, pusieron en duda el valor del hallazgo. "Gracias a información proporcionada por un científico iraquí que trabajó durante 10 años en esos programas, los expertos descubrieron enterrados en la arena precursores de un agente tóxico prohibido por las convenciones de armas químicas", informó la enviada especial del diario The New York Times, Judith Miller, quien siguió las investigaciones realizadas por los militares.
Miller afirmó que no fue autorizada a identificar los precursores hallados ni a entrevistar al científico iraquí, y que debió esperar tres días antes de publicar la información, que también fue sometida a la censura previa de los militares. Según la periodista, el científico iraquí reveló que cuatro días antes del ultimátum de 48 horas lanzado el 17 de marzo por el presidente estadounidense George W. Bush a Saddam Hussein para que abandonara el poder, responsables iraquíes habían incendiado un depósito que ocultaba un laboratorio de investigación de armas biológicas.
Además, varios meses antes del lanzamiento de la ofensiva militar estadounidense, los miembros del régimen de Hussein habían enterrado precursores químicos y otros productos sensibles para disimular su existencia y preservarlos para el futuro, dijo la fuente. De acuerdo a los militares estadounidenses, el científico afirmó que a mediados del último decenio Irak había enviado secretamente a Siria armas y tecnología no convencionales, y que más recientemente Bagdad había cooperado con la red terrorista Al Qaeda de Osama Bin Laden.
Dudas de inspectores de la ONU
La Casa Blanca fue informada el pasado viernes de estos descubrimientos, que según los expertos militares, son hasta el momento el mayor hallazgo realizado en la búsqueda de armas de destrucción masiva en Irak. La Comisión de Vigilancia, Verificación e Inspección de la ONU (Unmovic) reaccionó con escepticismo ante reportes sobre el hallazgo de componentes de supuestas armas ilegales en Irak. La Unmovic estuvo a cargo de las frustradas inspecciones de armas realizadas antes de la guerra en Irak, que debieron terminar antes de tiempo por el ataque norteamericano.
El portavoz de Unmovic Ewen Buchanan apuntó en Nueva York que numerosos componentes de armas químicas también son empleados para proyectos civiles. Un ejemplo es el cloro, indicó, importante material para el arma química gas mostaza, pero que también se utiliza para la purificación del agua potable. La Unmovic advirtió que hasta que no se conozcan más detalles sobre las sustancias halladas, es demasiado pronto para concluir que debe tratarse de componentes de armas de destrucción masiva.