Los hinchas rojinegros estuvieron de estreno. Y más de uno se emocionó cuando al mismo tiempo en que Newell's hacía su ingreso al campo de juego desplegaba una enorme bandera de 70 metros que cubría toda la bandeja baja de la popular que da al hipódromo. Y como para el clima de fiesta fuera total se le agregó el aditivo del humo color rojo y negro que se expandió por todo el Coloso. Una hora antes del encuentro un grupo de hinchas leprosos realizaban las gestiones pertinentes para poder trasladar la bandera a la popular. Así, acompañado por algunos uniformados, que previamente la requisaron, pudieron ingresarla y estrenarla ante un estadio colmado y que parecía rugir. Más allá de todo esto hay algo que se debe recordar, ya que está vigente una prohibición para ingresar a una cancha banderas de grandes tamaños y sólo se pueden llevar las de pequeñas dimensiones. Pero como ocurrió en el último clásico, cuando la policía autorizó a los canallas mostrar el enorme trapo que poseen, ayer hizo lo mismo con los leprosos, que se dieron el gran gusto de ponerle al encuentro ese color que se fue perdiendo por culpa de los violentos. Y mientras las cosas se hagan de la manera correcta, eso no está mal.
| |