Rodolfo Parody / La Capital
"Sacamos todos los puntos que debíamos sacar, y de yapa el punto contra River". El análisis del hincha leproso ni bien se alejaba del Coloso tiene algo de lógica. Es que a priori, salvo el choque contra los millonarios, los demás no parecían inaccesibles. Claro que bien dicen que los partidos hay que jugarlos. Y por el momento los números son por demás de halagüeños para Newell's. Es que luego de rescatar un empate sin goles con el campeón River en el Monumental, cuando la premisa era sumar sin arriesgar en demasía, se ganó en el minuto final contra Huracán con gol de Liendo en el Coloso en el momento en el que ya se escuchaban algunos reproches desde las tribunas. El rendimiento distaba del ideal. Y contra Arsenal en Sarandí arrancó perdiendo. Pero la desventaja lo obligó a un cambio de actitud y Marino, que jugó de titular por primera vez, y Ponzio le dieron otros tres puntos. Una de las principales deudas de Newell's pasaba por sus delanteros, que hasta antes del encuentro contra Talleres no habían logrado festejar ningún gol. Sin embargo, la historia cambió contra los cordobeses. Y los cuatro goles fueron de los atacantes: Rosales, Sacripanti, Lagorio y Rodas, con lo que se comenzó a saldar una de las deudas. Además el resultado se respaldó con una actuación convincente. Newell's viene creciendo, llegó arriba y ganó lo que en un principio debía ganar. Y no es poco.
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