El estallido. La mayoría de los comercios optaron por permanecer cerrados Saqueos, pedradas e tiroteos volvieron a adueñarse de la zona sur La tensión ganó las calles nuevamente y hubo violentos choques entre policías y manifestantes | | | La zona sur fue otra vez epicentro de la violencia. |
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El día después del estallido encontró a distintos puntos de Rosario sumidos en la tensión y la violencia. Hubo saqueos en algún sector de la zona oeste e intentos de robos y fuertes tiroteos y pedradas en el sur, que ayer se convirtió en el área más conflictivo de la ciudad. Mientras tanto, la mayoría de los comercios permanecieron cerrados o atendieron con sus persianas bajas. El ulular de las sirenas volvió a aturdir los barrios y los estampidos de las armas erizaron la piel de los vecinos. El... |
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| El estallido. Está internado, en observación, pero fuera de peligro Balearon a un periodista de La Capital Claudio Berón fue alcanzado por una bala en la espalda mientras cubría un piquete en reclamo de alimentos | | | Berón es acompañado para ir al Hospital de Emergencias. |
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No es sencillo ni fácil el oficio del periodista. Muchas veces, para garantizar la libertad de expresión y el derecho de la población a estar informada, debemos estar presentes en lugares que no elegimos. Nuestro objetivo es cubrir desde cerca todos y cada uno de los hechos para después comunicarlos desde un lugar imparcial. Así, en estas últimas horas, periodistas de La Capital y de todos los medios de comunicación del país, muchos de los cuales sufrimos en carne propia la profunda depresión ec... |
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| El estallido. Duelo en Rosario por las víctimas de los incidentes del miércoles La muerte de Pocho Lepratti marca el nacimiento de un mártir en Ludueña Una multitud de jóvenes, mujeres y niños desconsolados se convocó en el barrio para despedir sus restos | | | En el velatorio se vivieron escenas desgarradoras. |
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Caminaba Ludueña como si fuera su casa. En ese paisaje de calles de tierra, chicos descalzos, jóvenes al límite de la indigencia, comedores comunitarios y docencia solidaria, estaba su casa. Muy pocos conocían a Claudio Lepratti por su nombre. El era, y sigue siendo, Pocho. Tenía 38 años, llegó de Concepción del Uruguay y fue a vivir a la villa para ayudar a los más necesitados. Coordinaba talleres para niños y adolescentes, daba clases de filosofía y teología en la escuela de la parroquia del p... |
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