Furia vecinal contra un hombre violento

Fue en otro barrio y por otras razones, pero lo cierto es que la policía volvió a salvar al Gordo Pompo de otro episodio de furia vecinal en su contra. El ex convicto de 29 años que en noviembre pasado fuera acusado por los vecinos de Cullen al 2800 de haber abusado de una sobrina de 11 años volvió a protagonizar una noticia policial el domingo a la tarde en barrio Godoy. En este caso, el hombre terminó imputado, ya que la emprendió contra policías que lo querían detener por molestar al vecindario.

El nuevo altercado comenzó el domingo alrededor de las 15 en inmediaciones de Fader y Bertolé, a metros de la comisaría 32ª de barrio Godoy. De acuerdo a lo revelado por los voceros consultados, un vecino llegó hasta la seccional para denunciar que el Gordo Pompo, tal como se lo conoce a Cristian Omar Tabárez, estaba tirando piedras contra casas y autos. Dos efectivos salieron entonces a buscarlo y lo encontraron caminando por Bertolé "golpeando las puertas de las casas".

"Lo encontraron borracho o drogado -recordó la fuente- y quisieron disuadirlo de su actitud. Pero él respondió con insultos y cuando le pidieron que los acompañara a la comisaría, pateó un auto y empezó a amenazar de muerte a los vecinos. Se pudo escapar corriendo y lo alcanzaron a media cuadra, cuando intentaba meterse en una casa. Después intentó resistirse y le alcanzó a pegar a los policías mientras lo esposaban".

El vocero consultado agregó que "mientras le pegaba a la policía se empezó a juntar gente que quería linchar a Tabárez", lo cual originó una trifulca entre unos 30 vecinos y efectivos de la 32ª que tenían que preservar al detenido, quien quedó imputado de lesiones y resistencia a la autoridad.


"Robo y gano"
El pasado miércoles 29 de noviembre efectivos de la misma comisaría y de la Zona de Inspección N º 8 afrontaron una violenta revuelta vecinal para evitar que la furia de unos 300 vecinos desembocara en el linchamiento del Gordo Pompo Sin embargo la gravedad de aquel episodio en el que se intercambiaron piedras y balas de goma y terminó con un móvil policial destrozado no puede compararse con lo ocurrido el domingo salvo por la presencia del mismo hombre como objeto de la furia

"Yo tomo porque robo y gano", les llegó a decir aquella vez Tabárez, pertrechado en la humilde vivienda de su hermano, a quienes querían pegarle porque afirmaban que había violado a su sobrina discapacitada de 11 años. Según afirmaban los encolerizados vecinos, el gordo estaba "tomando pala" mientras los policías mantenían un cordón para evitar el linchamiento. Finalmente, la policía concretó una maniobra de distracción y sacó a Tabárez a salvo por un patio trasero, lo que desató una furiosa pedrada por parte de más de un centenar de personas.

Tabárez ya había sido atacado por los vecinos en noviembre.