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 jueves, 22 de junio de 2006  
Estudiante denunció que fue violada en una estación de subte

Buenos Aires.- Una estudiante universitaria de 21 años denunció que fue violada debajo de una escalera de la céntrica estación Callao de la línea B del subte, hasta donde fue llevada de los pelos por dos hombres que la sacaron de un vagón. La joven aseguró ayer que el hecho ocurrió a las 15 del viernes, pero que por miedo no le contó nada a nadie hasta el domingo, cuando se quebró y relató lo que le había sucedido a su madre.

La estudiante aseguró que había salido de la facultad minutos antes de la violación y tenía que encontrarse con su madre para realizar un trámite, por lo planeaba tomar el subte en la estación Callao y en dirección a Avenida de los Incas. "Cuando yo entraba al subte y se cerraban las puertas, sentí que me tiraban de la campera para atrás. Yo pensé que era alguien se estaba cayendo y se agarró de la campera. Entonces yo me caí de espaldas al piso", contó la estudiante.

"Mientras estaba en el piso, vi que las puertas se cerraron y el subte arrancó y no quedó nadie más en el andén. Entonces sentí que me levantaron de los pelos y me llevaron hasta una escalera, donde pasó todo", expresó la joven.

Tras la violación, los agresores le robaron 20 pesos que llevaba en su billetera y huyeron. "Vamos que no tenemos más tiempo", dijo uno de los dos violadores ante la llegada de otro convoy. Ante la desesperación y el llanto, la chica fue auxiliada por un hombre que le preguntó si la habían asaltado.

"Ese hombre la ayudó, pero mi hija se subió al subte otra vez y se vino a buscarme, tal como estaba planeado", dijo la madre de la joven. En ese momento, la chica estaba bajo una crisis emocional y no paraba de llorar, pero apenas le contó a su madre que había sido asaltada sin mencionarle nada respecto a la violación. "Ese día no le pude decir nada a mi mamá, sólo que me habían robado. Recién a los dos días pude hablar porque tenía mucho miedo que si hablaba me llevaran a un lugar para que me revisen y no quería", enfatizó.

La vigilancia en la estación ubicada en el cruce de las avenidas Corrientes y Callao está a cargo de una empresa de seguridad privada y la Policía Federal, quienes se desempeñan en el sector de boleterías y el hall de esa estación, en donde funcionan varios comercios.

Ante la consulta sobre si podía llegar a identificar a los delincuentes, la muchacha dijo que tal vez podría a identificar sólo a uno de ellos. "Al que estaba conmigo tal vez lo pueda identificar, no sé, pero el otro no, porque estaba de espaldas agachado en el piso, revisando mi mochila y yo de los nervios que tenía no miraba nada", finalizó la chica. (Télam)
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