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 domingo, 14 de agosto de 2005  
Chile: invierno en el volcán
Cruzar la cordillera desde San Martín de los Andes para recorrer Pucón y Villarrica es una tentación de fácil acceso

Leonardo Freidenberg

Los argentinos escuchamos desde chicos diversas historias sobre el cruce de la cordillera de los Andes: las clases sobre José de San Martín y su epopeya libertadora dejaron instalado en el imaginario individual y colectivo aquella región del mundo. Sin embargo, con los años, comenzamos a descubrir que el cruce de los Andes no es sólo una leyenda épica cargada de heroísmo, sino que puede convertirse en una opción para el goce de vacaciones perfectas. Hoy, desde San Martín de los Andes, sólo 200 kilómetros separan a esa ciudad neuquina famosa por el espectacular cerro Chapelco, de la zona de Pucón y Villarrica, en Chile.

El cruce se hace por el paso Tromen, conocido también como Mamuil-Malal, a través de una ruta que combina pavimento con 100 kilómetros de ripio. Por eso, en verano no hace falta más que un vehículo común, mientras en invierno las cadenas son aconsejables por la acumulación de nieve.

Región repleta de lagos, volcanes, bosques y montañas, Pucón y Villarrica son dos pequeñas ciudades chilenas enclavadas en un entorno sorprendente. Allí, el volcán Villarrica, con un cráter de 200 metros de diámetro, destaca por su imponente presencia, y además, porque está en actividad.

Esa vida interior del Villarrica se manifiesta de día, con sus permanentes fumarolas, y de noche, porque destella en la oscuridad por el resplandor que produce la lava. Los aventureros eligen justamente los horarios nocturnos para ascender al volcán y bajar esquiando sobre nieves eternas.

Precisamente allí se encuentra el centro de deportes invernales, Ski Pucón, sobre la pared noroeste del volcán, desde cuya cima hay increíbles vistas de cinco lagos de la zona. Veinte pistas para esquiar y hacer snowboard, con diferentes grados de dificultad que van desde las fáciles hasta las muy difíciles pasando por varios niveles intermedios, están hasta octubre cubiertas de nieve.

Además de los deportes blancos, muy cerca del centro de esquí hay varias cuevas volcánicas dotadas de luces y escalones en un recorrido de 700 metros que suelen ser recorridos por turistas acompañados de un guía.

La flora y la fauna también le dan un toque de encanto y de vida a esta parte del mundo, especialmente dentro del Parque Nacional Villarrica, a 12 kilómetros de la ciudad de Pucón. Se trata de un reservorio de araucarias antiguas, arrayanes, lengas y coihues, donde conviven zorros, pumas, ciervos pudú, varias especies de patos y aves de todo tipo.

Los alrededores de Pucón y Villarrica, dos pequeños centros urbanos separados por 24 kilómetros, no son un atractivo sólo para el invierno. En verano, al entorno natural se le suman los balnearios y un capítulo especial merecen las termas de Huife, Palguín, Coñaripe, San Luis, Menetúe, Quimey-co y Panqui.

Debido a su condición de zona turística por excelencia, en Pucón y Villarrica abunda la oferta de servicios de primer nivel, tanto en el rubro hotelero como en el gastronómico -son especialmente recomendables las especialidades de origen mapuche- y en excursiones y actividades de toda índole.

Uno de ellos es el Gran Hotel Pucón, de 4 estrellas con 145 habitaciones y 121 departamentos de uno a cuatro ambientes, ubicado en la orilla del lago Villarrica, que suele ofrecer programas para los amantes del golf en el club La Península. Otro de esos establecimientos de lujo es el Villarrica Park Lake (5 estrellas), situado a mitad de camino entre los poblados de Pucón y Villarrica, rodeado por jardines maravillosos y espectaculares vistas panorámicas desde cada una de sus dependencias.

El spa del hotel es memorable: tiene 1600 metros cuadrados, con sauna seco y baños de vapor, gimnasio completo, tratamientos de belleza, pileta cubierta templada con jacuzzi incorporado, y piletas externas para el verano.

Quienes disfrutan de los juegos de azar y del glamour de un buen casino tienen como opción el Hotel del Lago Resort & Casino de Pucón, considerado uno de los mejores cinco estrellas de Chile.

También hay allí un magnífico spa con gimnasio, dos saunas, sala de masajes terapéuticos, pileta cubierta y jacuzzi, salón de belleza y el casino abierto los 365 días del año, en el que puede jugar a la ruleta, dados, punto y banca, baccarat americano, blackjack y una larga lista de juegos menos conocidos en Argentina.

Si bien el tipo de cambio no es favorable para los argentinos, los precios de paquetes para visitar Pucón-Villarrica no difieren demasiado de las opciones nacionales de este lado de la cordillera y son una oportunidad accesible para quienes quieren descubrir lugares nuevos.
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El volcán Villarrica despide fumarolas permanentes. El ascenso nocturno es un deleite para los esquiadores.

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