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 sábado, 13 de agosto de 2005  
Un detenido y 12.540 litros de fungicida secuestrados en Tostado
Descubren una fábrica de herbicidas truchos
Con un litro del fluido legal hacían 20 del falsificado. Y lo vendían a un 50% menos que el verdadero

Leo Graciarena / La Capital

Una banda de falsificadores de herbicidas y el secuestro de 12.540 litros de glifosato concentrado fue el resultado de un operativo realizado a sólo seis cuadras de la Jefatura de policía de la ciudad de Tostado. "La falsificación era muy buena. Te daban el bidón con las etiquetas y precintado, como viene el legal. Además utilizaban químicos y colorantes para diluirlo pero con una apariencia casi exacta", explicó uno de los pesquisa que participaron del operativo. Y agregó: "Vendían cada bidón de 20 litros en 40 o 50 dólares cuando en el mercado legal está en 70 dólares o más". En principio hubo cuatro detenidos, pero sólo uno quedó preso a disposición del juez Eladio García, imputado de violar la ley de marcas y estafa.

El bidón era exactamente igual al legal. Tenía las etiquetas, los precintos y cuando se abría, el olor y color del líquido era inconfundible: glifosato. Y en tiempos de fumigar los campos, "el diablo anda tentando a los gringos", como sentenció el informante. "Se estuvo trabajando y haciendo inteligencia durante 45 a 60 días a partir de interceptar en una calle de Tostado una camioneta Chevrolet bordó que llevaba a 75 bidones de 20 litros de glifosato concentrado soluble", dijo el vocero. "Después se comprobó que era herbicida adulterado y de muy buena calidad", contó.


Muy cerca de la Jefatura
Tras la detención de Néstor Rodolfo D., de 50 años, los pesquisas sólo tuvieron que seguir la huella del fungicida. La sorpresa fue mayor cuando descubrieron el lugar de procedencia del producto trucho. "La fábrica está a seis cuadras de la Jefatura, en pleno centro de Tostado", comentó el vocero. Según detalló, por cada bidón de 20 litros de glifosato "bueno", los delincuentes sacaban 20 bidones de herbicida adulterado.

Cuando los pesquisas llegaron a la fábrica donde se adulteraba el fungicida secuestraron 552 bidones de 20 litros listos cada uno listos para ser ingresados en el circuito del mercado negro. Pero además, los vigilantes de Unidades Especiales de la UR12 encontraron maquinarias de elaboración y mezcla de los fluidos, bidones almacenados y una máquina que estampaba las etiquetas de, al menos, cuatro marcas reconocidas del mercado. "Tenían las etiquetas casi exactas y hasta los tapones con precinto que tienen los legales", comentó el investigador.

En el lugar fue arrestado Jorge Luis P., de 36 años, quien es el dueño de la fábrica y de la casa lindera al lugar de producción. Este hombre es el único que quedó detenido como infractor a la ley de marcas 22.362 y por estafa. También fueron detenidos en distintos procedimientos -y luego liberados junto a Néstor Rodolfo D.-, Juan S., de 36 años, y Darío B., 28. "Además se secuestraron 25 kilos de químicos que usaban en el proceso de adulteración", confió la fuente.

"La proporción era más o menos un 10 por ciento de herbicida en 20 litros de agua mezclado con químicos y anilina. Cuando los gringos abrían el bidón sentían el olor y veían el color. Después lo usaban y el campo se le llenaba de bichos", confió el vigilante. "Pero como lo habían comprado por izquierda, nadie abría la boca", explicó. Los hampones se movían preferentemente de noche, en camionetas, y su radio de acción abarcaba el norte santafesino, Chaco y Santiago del Estero.
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La mercadería era envasada bajo reconocidas marcas comerciales.

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