Yo opino

Los recreos, los preferidos

En la escuela escribimos, a veces leemos y, a veces, nos dejan un rato para hablar, nos hacen preguntas y después salimos al recreo. Es lo más divertido: jugamos a la popa, a la pelota y a la escondida (tenemos un lugar para escondernos detrás de las columnas).

El patio de mi escuela es grande, más que el patio de mi casa. Tiene un lugar que está techado, que es para los de preescolar; otro que casi está techado que es para los más grandes y el que no tiene techo es para nosotros, los de segundo y tercer años. Es el que está cerca del kiosquito. Y a mí me gusta jugar en el que no tiene techo.

Me gustan los recreos, más que las clases de matemática donde hay que escribir números, o las de lengua cuando hay que escribir mucho. Prefiero leer, más que escribir a mano. En algunas materias se pueden hacer otras cosas, como en tecnología, que te podés mover un poco más. Me gustaría que haya una sala con juegos de mesa, que se pueda jugar a las cartas y al ping pong.

Al recreo salimos cuando toca el timbre. Pero si nos portamos mal, nos descuentan cinco minutos de recreo. Me parece que eso está mal.

Albertina Oro. Tiene 7 años y es de Rosario.