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 lunes, 13 de diciembre de 2004  
Un brindis por Marcelo

"Marcelo no está en la ciudad". La frase se escuchó una y otra vez durante la semana. Una voz femenina (probablemente su esposa Laura), con una enorme dosis de paciencia atendió una y otra vez los llamados que requerían la presencia del gran ausente en estos tiempos de gloria rojinegra.

"Marcelo no está en la ciudad, ni va a estar el domingo", se agregó a la respuesta el viernes. Como para que nadie se ilusione con tratar de saber cómo vivió Bielsa la gran estrella rojinegra.

¿Por qué será que Marcelo se priva de estos placeres? ¿Se privará de estos placeres? ¿Tanto es el daño que le causó la prensa al ex técnico de la selección nacional?

Marcelo niega, o hace negar, sistemáticamente su presencia y está en todo su derecho.

Se podría llegar a comprender que lo de ayer fue un triunfo deportivo y una derrota política para los Bielsa, aunque Marcelo ya se encargó varias veces de decir que jamás sería presidente del club.

Pero las prioridades no deberían pasar por la tirria hacia la prensa, las diferencias políticas con la actual dirigencia, la timidez o la sofocación que todavía da vueltas después de estar a cargo de la selección.

¿Dónde está Bielsa? ¿Por qué no se dio el gran gusto de vestirse de hincha, como pocas veces en su carrera?

Quizás a él no le preocupe demasiado, o en todo caso no esté de acuerdo con el concepto, pero Marcelo debería entender que, aunque no le guste, es un ícono en la historia de Newell's desde hace más de una década.

Y debería responder a la altura de las circunstancias.

¿Por qué esconderse? ¿Por qué desaparecer?

Claro, inmediatamente aparecen las preguntas que se hacen del otro lado del mostrador. ¿Por qué juzgarlo? ¿Por qué tratar de interpretar sus sentimientos y actitudes? ¿Por qué no dejarlo en paz?

Seguramente lo celebró como a él le gusta. Sin que nadie que no deba, se haya enterado.

Forma parte de esta historia. Tiene un porcentaje de responsabilidad.

Vaya una copa para brindar también con Marcelo. Aunque sea un "chin chin" imaginario.
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