Un fiscal santafesino intimó a la provincia para que reparen las defensas del río Paraná

Santa Fe.- El fiscal Héctor Millen intimó al Estado santafesino, a partir de una presentación judicial de asociaciones vecinales de la costa, para que repare las defensas del río Paraná y prevenir así una catástrofe como la sucedida en abril con el desborde del Salado. En un dictamen de inusitada dureza, en el que el fiscal incluso admite interesarse en el tema "como ciudadano", Millen le pidió al juez de primera instancia del distrito 1º, Jorge Garraza, que obligue a la provincia a realizar "los trabajos necesarios para la protección material frente a cualquier avance hídrico en su zona de habitabilidad, en tiempo breve e inmediato".

La presentación fue hecha por la Vecinal Pro Adelanto Colastiné Norte, Asociación Cultural de la Costa, Villa California, Cooperativa de Viviendas y Servicios Públicos de Rincón y Vecinal de Arroyo Leyes, entre otras. Sin embargo, la medida cautelar no le movió un pelo al gobierno provincial, cuyo representante pidió rechazarla de plano exponiendo una vasta gama de argucias legales que de ninguna forma supone una respuesta efectiva para los vecinos.

El documento del fiscal recuerda lo sucedido en la costa oeste a partir de lo sucedido con el aluvión del río Salado y pide "una serie de acciones decididas y prestas para que lo ocurrido no suceda nunca más en ningún lugar del territorio". Y tras referirse a la "triste experiencia de la que nadie asume ser responsable, aun tangencialmente, no obstante lo notorio que era prever lo fatalmente sucedido", dispara con énfasis: "Así vemos, patéticamente, que las tareas de reacondicionamiento del terraplén oeste recién ahora tienen miras de ser completadas con el rellenamiento del corte que se hiciera a la vera norte del puente carretero Santa Fe-Santo Tomé, mediante tareas que han comenzado recién esta semana".

El fiscal consideró lógica la intervención del Poder Judicial "teniendo en cuenta los intereses lesionados", y afirmó: "Los entes oficiales omiten permanentemente el cumplimiento de sus obligaciones. Es decir, no se refuerzan ni se mantienen óptimos los terraplenes que protegen a los vecinos. Muy por el contrario, puede denotarse que en este caso se empecina en enfrentarse y desoír el clamor ciudadano, interponiendo cualquier excusa legal, y deriva responsabilidades en uno u otro organismo gubernamental en lugar de adoptar una actitud drástica y sencilla como es la de efectivizar un plan inmediato de protección".