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 miércoles, 26 de noviembre de 2003

Un repartidor murió arrollado por ladrones que huían
Los delincuentes iban en una moto robada y seguidos por la policía cuando chocaron el ciclomotor de la víctima

Buenos Aires.- Un repartidor de pizza murió como consecuencia de los golpes que sufrió al ser embestido por delincuentes que huían en una moto robada, en el barrio porteño de Floresta. Poco después, tras un tiroteo con la policía, los dos maleantes fueron detenidos, uno de ellos herido de bala y el otro politraumatizado.

Según las fuentes, Alejandro Maggiorano, de 26 años, murió por los politraumatismos severos que sufrió cuando el ciclomotor que conducía fue embestido por la motocicleta en la que huían los ladrones y cayó al piso sin llevar casco puesto.

Las fuentes indicaron que el dueño de la moto en la que circulaban los delincuentes se presentó a la policía para denunciar que la vio por televisión y que se la habían robado la noche del lunes, alrededor de las 22.30, a mano armada.

Los hechos se iniciaron antes de la medianoche cuando, según la policía, los dos delincuentes que iban en la moto se cruzaron con un patrullero de la comisaría 43. Los policías quisieron identificarlos, encendieron las balizas del móvil y, según las fuentes, los delincuentes mostraron sus armas, apuntaron a los agentes y dispararon.

Así se inició una persecución y primer tiroteo del cual los delincuentes escaparon a toda velocidad. Al llegar al cruce de calles Bacacay y Mercedes embistieron con su moto a Maggiorano, que tripulaba un ciclomotor y hacía repartos para la pizzería "Moscato, Pizza y Fainá".

Allí se produjo un segundo tiroteo ya que, según contaron los voceros, uno de los delincuentes se levantó del piso con un arma en la mano y disparó contra uno de los policías. El suboficial repelió la agresión y le acertó un balazo en el pecho, por lo que fue detenido en forma inmediata.

Las fuentes contaron que el otro delincuente no pudo reponerse al accidente que sufrió al embestir al repartidor de pizza y fue rápidamente detenido con politraumatismos.

En el lugar del choque y el segundo tiroteo, las fuentes contaron que los investigadores secuestraron una pistola calibre 22 y tres vainas servidas. (Télam)

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